La Generalitat aument¨® un 61% la dotaci¨®n a la escuela privada en los ¨²ltimos cinco a?os

Mientras que el esfuerzo presupuestario de la Generalitat para implantar la reforma escolar, entre 1994 y 1999, supuso un aumento global del 35,6%, los recursos destinados a los centros privados concertados crecieron casi el doble (61,3%), tal y como se desprende de la liquidaci¨®n de los presupuestos. Por esta raz¨®n, el peso de las partidas destinadas a conciertos en relaci¨®n al conjunto del presupuesto de Ense?anza pas¨® de un 20% en 1994 a un 24% en 1999. Durante este periodo, Ense?anza increment¨® en 34.000 millones de pesetas los gastos dedicados a conciertos.

A trav¨¦s de los conciertos educativos, la Generalitat costea parte de los gastos de los centros privados que imparten la ense?anza obligatoria. Esta financiaci¨®n es doble: por una parte, se fija un importe anual por unidad escolar, que ayuda a financiar el funcionamiento de las aulas; por otra, se paga la totalidad del sueldo de los profesores, partida que se lleva la mayor parte del dinero.Ram¨®n Farr¨¦, secretario general de Ense?anza, argumenta que el aumento del dinero destinado a conciertos fue debido a tres factores, todos relacionados con la implantaci¨®n de la reforma en los centros concertados: el incremento de dos cursos financiados con fondos p¨²blicos por la prolongaci¨®n de la escolarizaci¨®n hasta los 16 a?os, el aumento de las retribuciones al profesorado y el descenso del n¨²mero de alumnos por aula.

Farr¨¦ defiende que gracias al aumento del gasto en conciertos se ha podido mejorar la calidad de la ense?anza en el sector privado y, asimismo, en todo el sistema educativo. Tambi¨¦n destaca que ha permitido igualar las retribuciones de los docentes de la concertada respecto a los de la p¨²blica. En 1995 los profesores de la privada concertada cobraban el 90% de lo que percib¨ªan los de la p¨²blica. Este porcentaje ha ido aumentando hasta llegar al actual 95%.

Cr¨ªticas sindicales

Los sindicatos con representaci¨®n en la ense?anza p¨²blica y la privada, CC OO y UGT, piden que las retribuciones de los dos colectivos se igualen completamente, lo que significar¨ªa aumentar el dinero destinado a conciertos. Conscientes de ello, advierten de que la verdadera causa del incremento del gasto en conciertos no ha sido la equiparaci¨®n salarial, sino la pol¨ªtica de Ense?anza de favorecer a la privada. Joan Carles Gallego, secretario de Ense?anza de CC OO, asegura que "lo que se evidencia con este incremento es que los presupuestos destinados a la educaci¨®n han crecido de forma insuficiente".

Los sindicatos tambi¨¦n critican que el aumento de los recursos destinados a centros privados no se reflejara en los presupuestos. En 1998, por ejemplo, el presupuesto inicial indicaba una partida de 64.835 millones de pesetas. En realidad, se gast¨® ese mismo a?o la cantidad de 82.200. Seg¨²n el secretario general de Ense?anza, la disparidad entre lo presupuestado inicialmente y lo realmente gastado ha terminado. Farr¨¦ afirma que la partida destinada a conciertos ha dejado de ser abierta. "Pueden existir desviaciones, pero ser¨¢n peque?as", asegura. Este cambio, seg¨²n Farr¨¦, demuestra la "voluntad de transparencia y control" de la nueva consejera, Carme Laura Gil. No obstante, asegura que ahora es m¨¢s f¨¢cil controlar el gasto porque se conoce con m¨¢s exactitud el n¨²mero real de unidades concertadas, lo que no suced¨ªa cuando era titular de Ense?anza Xavier Hern¨¢ndez.

El aumento de aulas en la concertada, fruto de la escolarizaci¨®n hasta los 16 a?os, es evidente. Hern¨¢ndez, en un discurso en el Parlament, afirm¨® que la implantaci¨®n de la reforma en el sector privado hab¨ªa originado un aumento de 1.495 unidades concertadas. Esta situaci¨®n supone que la Administraci¨®n costea dos cursos m¨¢s, que antes no estaban concertados. En el anterior sistema, se concertaban primordialmente las unidades de primaria, por ser el ¨²nico tramo obligatorio. En teor¨ªa, este aumento ha servido para sufragar los gastos derivados de la reforma en el sector privado.

Otra consecuencia del aumento de unidades concertadas de Secundaria proviene del hecho de que los alumnos de Primaria permanecen en el centro al pasar a la ESO, mientras que antes de la reforma sol¨ªan pasarse a los centros p¨²blicos, por ser en algunas zonas los ¨²nicos que impart¨ªan la ense?anza gratuita. Asimismo, los centros concertados han empezado a recibir alumnos procedentes del sector p¨²blico, ya que el concierto ha hecho que sus precios sean mucho m¨¢s asequibles. Se calcula que el 10% de los alumnos pasan de centros p¨²blicos a privados al llegar el primer curso de la ESO.

El sindicato USTEC-STEs, uno de los m¨¢s cr¨ªticos, junto con la CGT, con la pol¨ªtica de conciertos llevada a cabo por Ense?anza, afirma que el incremento de unidades no puede justificarse por la prolongaci¨®n de la escolarizaci¨®n obligatoria hasta los 16 a?os. Ramon Simon, portavoz de USTEC-STEs, sostiene que el verdadero problema es que "se han aumentado las unidades de ESO por encima de la demanda real de plazas". Simon cree que se ha beneficiado a la escuela privada: "No se ha respetado el equilibrio entre la p¨²blica y la privada, lo que ha permitido que la patronal pudiera introducirse en la secundaria. Y todo ello ha ido en detrimento de la escuela p¨²blica: mientras se cerraban aulas p¨²blicas, se manten¨ªan o abr¨ªan unidades privadas".

Cuotas por actividades

Farr¨¦ niega que el incremento se atribuya a esta causa e insiste en que existen las mismas unidades concertadas que antes de la reforma, lo que se explicar¨ªa por el cierre de unidades concertadas al no poder adaptarse a los cambios de la reforma.

Ense?anza justifica su pol¨ªtica de conciertos en que deb¨ªa generalizarse la reforma en el sector privado concertado para garantizar el derecho a la educaci¨®n gratuita y a la libertad de opci¨®n educativa. Para garantizar estos derechos, los centros concertados no pueden cobrar matr¨ªculas a sus alumnos, pero s¨ª establecer cuotas por la realizaci¨®n de actividades fuera del horario escolar. Otra forma de matr¨ªcula encubierta es el cobro de cantidades destinadas a sufragar la fundaci¨®n del centro. Esto motiva que los hijos de familias con menos recursos no vayan a estos centros, ya que no se pueden costear estas cuotas, que en algunos casos incluso pueden superar las 20.000 pesetas al mes. Por este motivo, la comunidad educativa acusa a estos centros, que cobran el concierto para cumplir los mismos criterios que la p¨²blica, de seleccionar a su alumnado y de provocar concentraciones de alumnos inmigrantes o con pocos recursos en los centros p¨²blicos.