Los rebeldes de Sierra Leona ponen en libertad a 139 de los 'cascos azules' retenidos

El antiguo se?or de la guerra y hoy presidente de Liberia, Charles Taylor, creador en 1991 del Frente Revolucionario Unido (RUF), la guerrilla sierraleonesa, logr¨® ayer la puesta en libertad de 139 cascos azules. Como sucediera en los Balcanes, la ONU olvida el papel de Taylor en Sierra Leona y da la bienvenida a su "positiva mediaci¨®n", en palabras de Aluyami Adeniji, representante especial del secretario general de Naciones Unidas en Sierra Leona. Quedan 347 soldados en poder de los rebeldes. "Creemos que esto es s¨®lo el inicio y que todos ser¨¢n liberados", dijo en Freetown Adeniji.

Como en la Bosnia de Radovan Karadzic, Taylor interpreta un doble papel: alimenta la causa del RUF, que le reporta ping¨¹es beneficios en diamantes de contrabando (exporta seis millones de quilates al a?o cuando su producci¨®n no supera los 100.000), y a la vez cultiva un rol de estadista que ayer le report¨® muchos puntos.En la reuni¨®n de presidentes de ?frica Occidental celebrada el pasado martes, ¨¦stos, encabezados por el nigeriano Olusegun Obasanjo, le pidieron una gesti¨®n personal en favor de los cascos azules capturados hace un par de semanas por el RUF.

El domingo, el embajador Adeniji vol¨® hacia Monrovia y negoci¨® directamente con Taylor el modo en que se iba a producir la liberaci¨®n. "?sta ha sido incondicional", repiti¨® Adeniji en, al menos, tres ocasiones, pero despu¨¦s admiti¨® que en las conversaciones con el presidente de Liberia hab¨ªa surgido el nombre de Foday Sankoh, el l¨ªder hist¨®rico del RUF en paradero desconocido desde hace ocho d¨ªas. "?l me pregunto si sab¨ªa d¨®nde estaba; le respond¨ª que no, y le formul¨¦ la misma pregunta. El presidente Taylor tampoco tiene noticias". El embajador fue rotundo en este asunto: "Nadie en esta misi¨®n de la ONU sabe d¨®nde est¨¢; es falso que Sankoh escapara [de su mansi¨®n de Freetown], como se ha dicho, en un blindado de la ONU. Incluso se ha llegado a especular con que le ten¨ªa yo escondido en mi despacho".

El representante de Annan, quien desde Nueva York dio la bienvenida a la liberaci¨®n parcial de los cascos azules, tambi¨¦n asegur¨® que el hecho de que Taylor tenga ascendiente sobre varios comandantes del RUF no significa necesariamente que exista una relaci¨®n entre ambos. "El presidente de Liberia ha jugado un papel positivo en esta crisis, pues ha hecho ver a los rebeldes la gravedad de este secuestro".

Adeniji reconoci¨® que Taylor le pidi¨® que se detenga el avance de las tropas que apoyan al Gobierno de Sierra Leona, y el presidente liberiano mencion¨® en concreto el caso de Masiaka. "Le expliqu¨¦ que la toma de esta localidad por el Ej¨¦rcito no representa una ruptura del status quo, pues en ella estaban hace una semana los cascos azules de Guinea".

Detener la ofensiva

Taylor lleg¨® a decir, seg¨²n el embajador nigeriano de la ONU, que un avance m¨¢s all¨¢ de Masiaka "podr¨ªa poner en peligro la vida de los 347 cascos azules que a¨²n permanecen en poder de la guerrilla". Adeniji ya se ha puesto en contacto con el Gobierno de Freetown para que detenga la ofensiva.

Tambi¨¦n exigi¨® la devoluci¨®n del material militar robado a la ONU, con el que el RUF combate en Masiaka, seg¨²n las tropas que apoyan al Gobierno de Sierra Leona. "No tenemos constancia de que as¨ª sea", afirm¨® el representante de Annan.

El nigeriano Adeniji est¨¢ convencido de que el acuerdo de paz de Lom¨¦, firmado el 7 de julio de 1999, est¨¢ vivo. "Es la base del futuro de este pa¨ªs", asegur¨®, y a?adi¨® que el proceso de paz se puede reavivar. "Es necesario volver a la situaci¨®n anterior, para ello es imprescindible que se detengan los combates, proceder al desarme de las partes y a la liberaci¨®n de los civiles secuestrados [estos a?os] por el RUF". El embajador asegur¨® que ser¨¢ necesario buscar una nueva v¨ªa para lograr la entrega voluntaria de las armas y lanz¨® una advertencia: "Esta misi¨®n sigue siendo de mantenimiento de la paz; si se cambiara a otra de imposici¨®n de paz, deber¨¢ ser aprobada por el Consejo de Seguridad. De todos modos el cap¨ªtulo VII [el que se emple¨® para dar cobertura legal a la guerra del Golfo] es una ventana abierta, y la misi¨®n actual adem¨¢s permite emplear las armas para protegernos y proteger a la poblaci¨®n civil".

La ONU rechaza la existencia de un compromiso con el RUF para lograr la liberaci¨®n de los cascos azules o el vocablo fracaso para definir su misi¨®n en Sierra Leona. "Los rebeldes no avanzan sobre la capital y ahora est¨¢n muy lejos de Freetown", dijo Adeniji. Una periodista local le interpel¨®: "Masiaka se halla s¨®lo a 75 kil¨®metros". "Eso est¨¢ muy lejos", replic¨® el embajador. Era la ¨²ltima pregunta.