"All¨ª donde domina el terrorismo se anula la voz y la palabra"

Antonio Beristain (Medina de R¨ªoseco, Valladolid, 1924), director del Instituto Vasco de Criminolog¨ªa y miembro de la Compa?¨ªa de Jes¨²s, acaba de publicar el libro Victimolog¨ªa. Nueve palabras clave. A trav¨¦s de los diversos art¨ªculos recogidos en esta obra, Beristain manifiesta su preocupaci¨®n por los derechos humanos y alude a la relaci¨®n de la grandes religiones con las v¨ªctimas. Asegura que la sociedad vasca ha vivido de espaldas a los afectados por la violencia y que en todos los pa¨ªses en los que pervive el terrorismo, las personas viven aplastadas por el elefante invisible del miedo. Pregunta. ?Qu¨¦ le ha llevado a escribir sobre las v¨ªctimas?

Respuesta. Mi sensibilidad, m¨¢s o menos atinada, me exige e impulsa a estar con ellas. Hay en las v¨ªctimas una seguridad, un algo diferencial, un elemento invisible e inalienable, una riqueza que las distingue para siempre. Esto lo viv¨ª desde la infancia, sent¨ª una experiencia especial en Jerusal¨¦n en setiembre de 1973 durante el Congreso Internacional de Victimolog¨ªa, y despu¨¦s, la cercan¨ªa con las v¨ªctimas directas e indirectas, con los afectados por la violencia de pa¨ªses europeos y latinoamericanos, y las v¨ªctimas en las c¨¢rceles.

P. En Euskadi, las v¨ªctimas del terrorismo dicen que la sociedad se ha olvidado de ellas ?Por qu¨¦ ha ocurrido?

R. Esa pregunta me la he hecho siempre y no he obtenido respuesta. Conozco muchas personas en el Pa¨ªs Vasco, buen¨ªsimas personas y muy inteligentes, que viven de espaldas a las v¨ªctimas del terrorismo, as¨ª como en el mundo hay muchas personas que viven de espaldas al holocausto. Una explicaci¨®n, que no me satisface, es que se padece el s¨ªndrome de Estocolmo, que padecemos una distorsi¨®n que nos hace confundir a las v¨ªctimas con los victimarios. Evidentemente, todos somos en parte responsables de los delitos que cometen personas concretas. Pero este principio elemental se deforma y caricaturiza; ante una victimaci¨®n de asesinato terrorista, se analiza como si fuera un conflicto entre vencedores y vencidos o entre bandos pol¨ªticos.

P. ?Por qu¨¦ esta sociedad ha sido capaz de solidarizarse con el preso de ETA y no con su v¨ªctima?

R. Cient¨ªficamente puede atribuirse mucho al s¨ªndrome inconsciente de Estocolmo. En cualquier ambiente terrorista muchas personas dir¨¢n que no tienen miedo, pero en realidad est¨¢n aplastadas por el elefante invisible del miedo. Como en esos pa¨ªses donde existe ese fen¨®meno, hay una c¨¢rcel invisible en la que muchas personas est¨¢n privadas de libertad.

P. ?Ocurre eso en Euskadi?

R. En el Pa¨ªs Vasco, desde hace muchos a?os, eminentes profesores y profesoras universitarios est¨¢n obligados a marcharse porque no pueden vivir en libertad. Como tuvieron que marcharse de Alemania los grandes cerebros en tiempos del nazismo. En los pa¨ªses en los que domina el terrorismo no se concede ni la voz ni la palabra. Y lo que intentan los grupos que aterrorizan es intentar anular a todos aquellos que piensan de manera diferente a su ideolog¨ªa fan¨¢tica.

P. ?Son responsables los partidos de lo que sucede?

R. Tienen una gran responsabilidad, pero la sociedad tambi¨¦n puede hacer mucho para salir de la situaci¨®n en la que estamos. No hay que olvidar que a los pol¨ªticos les escogemos y les pagamos los ciudadanos. Nunca se puede asesinar por ning¨²n ideal.

P. Usted que ha tratado tanto a los reclusos, ?cree que el reagrupamiento de los presos de ETA en las c¨¢rceles favorecer¨ªa la paz?

R. Desde el punto de vista de la criminolog¨ªa es inadmisible. Muchas personas que reivindican este tema no se destacan por haberse preocupado por todos los internos que est¨¢n en todas las c¨¢rceles del mundo. En Derecho Penal la responsabilidad es exclusivamente de quien transgrede las leyes. Sin embargo, seg¨²n la criminolog¨ªa o victimolog¨ªa ocurre lo contrario. Pueden darse casos en que las amistades y familiares de quienes delinquen tengan cierto grado de responsabilidad.

P. Se ha criticado a la Iglesia vasca por su ambig¨¹edad.

R.Como soci¨®logo tengo que decir que no he o¨ªdo a nadie que diga que la postura de la Iglesia va a peor. Creo que va a mejor.

P. ?La sustituci¨®n de Jos¨¦ Mar¨ªa Seti¨¦n por Juan Mar¨ªa Uriarte como obispo de San Sebasti¨¢n ha sido buena?

R. Yo no he o¨ªdo a nadie decir que sea mala.