Una sentencia no cree "particularmente vejatorio" amordazar y violar vaginal y bucalmente a una mujer

Un fallo de la Audiencia de Pontevedra estima que no puede considerarse como "particularmente vejatoria o degradante" la conducta de un violador que amordaz¨® a su v¨ªctima, la amenaz¨® con un cuchillo y le penetr¨® vaginal y bucalmente. La sentencia, firmada por el magistrado Jos¨¦ Juan Barreiro Prado, esgrime, como prueba de la ausencia de ese ¨¢nimo denigratorio, que el violador ofreciese un vaso de agua a la mujer cuando ¨¦sta estaba a punto de vomitar. Al no concurrir esas agravantes, el fallo condena al delincuente a siete a?os y medio de c¨¢rcel por violaci¨®n, frente a los 15 que solicitaban la fiscal¨ªa y la acusaci¨®n.

Los argumentos contenidos en la sentencia y lo que se interpreta como lenidad de la pena impuesta suscitaron ayer reacciones de indignaci¨®n en colectivos feministas. "Le preguntar¨ªa al juez si hubiese reaccionado lo mismo en caso de que la v¨ªctima fuese su madre, su esposa o su hija", declar¨® a la cadena SER la presidenta de Madres en Acci¨®n, Alicia del Burgo.El propio presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, del PP, sin entrar a analizar el fallo, pidi¨® una "reflexi¨®n" sobre la consideraci¨®n jur¨ªdica que reciben "hechos tan graves como ¨¦ste".

La sentencia considera probado que el 8 de abril de 1999, el vecino de Pontevedra Francisco Garrido Villanueva se hizo subrepticiamente con unas llaves del piso de su compa?era sentimental, al conocer que la hija de ¨¦sta, que entonces ten¨ªa 19 a?os, iba a estar sola en casa esa noche.

Con el rostro cubierto por una media, irrumpi¨® en la vivienda y oblig¨® a la chica a salir de debajo de la cama amenaz¨¢ndola con un cuchillo. A continuaci¨®n, la at¨® de manos y pies y la amordaz¨® con cinta adhesiva, aunque finalmente tuvo que liberarle la boca porque la muchacha se ahogaba.

Tras rasgarle el pijama con el cuchillo, Garrido Villanueva le penetr¨® vaginalmente y luego le introdujo el pene en la boca hasta eyacular. Como la joven sinti¨® n¨¢useas y dijo estar a punto de vomitar, el violador, una vez consumado el acto, le trajo un vaso de agua. Los ex¨¢menes forenses confirmaron la presencia de semen en la boca de la v¨ªctima.

La sentencia descalifica por "deleznable" la conducta de Garrido Villanueva, pero el magistrado, que cita numerosa jurisprudencia del Tribunal Supremo, argumenta: "La violencia ejercida por el procesado se considera que no revisti¨® el car¨¢cter particularmente degradante o vejatorio que exige el C¨®digo Penal para agravar la pena". "Resultan contrarios a toda conducta degradante o vejatoria", a?ade el juez, "el hecho de retirarle la cinta a la v¨ªctima a la altura de la boca y el de ofrecerle un vaso de agua".

"Llor¨¦ al leer el fallo"

Aunque la mujer fuese atada y amordazada, "tal forma de proceder se estima impl¨ªcita en la propia agresi¨®n sexual", a?ade el fallo. En cuanto al uso del cuchillo, "s¨®lo lo esgrimi¨® para hacer salir a la joven de debajo de la cama, para que estuviese quieta, para romperle las ropas y para exigirle la felaci¨®n situ¨¢ndoselo a la altura del cuello".

"Cuando conoc¨ª la sentencia, estuve toda la tarde llorando", confes¨® la v¨ªctima al diario Faro de Vigo.