El nuevo Museo Episcopal de Vic abrir¨¢ sus puertas dentro de un a?o

Un edificio a la medida de las obras de arte que ha de albergar, con un dise?o netamente contempor¨¢neo y en sinton¨ªa con el entorno medieval del n¨²cleo hist¨®rico de la capital de Osona. As¨ª se est¨¢ construyendo el nuevo Museo Episcopal de Vic, cuyas obras se encuentran ya en su fase final. El museo podr¨¢ inaugurarse dentro de un a?o. La colecci¨®n de arte rom¨¢nico, la segunda m¨¢s importante de Europa, podr¨¢ verse, por fin, en su plenitud junto a piezas g¨®ticas de gran calidad y en un marco digno de su importancia.

El edificio del museo ha sido dise?ado por Federico Correa y Alfonso Mil¨¤. Cuando se decidi¨® derruir el antiguo museo para construir uno de nueva planta en el mismo solar del n¨²cleo hist¨®rico de Vic, los dos arquitectos tuvieron claro desde un primer momento que ten¨ªa que respetar su entorno medieval, pero con una arquitectura contempor¨¢nea. Correa asegura: "Nosotros nunca hemos hecho edificios historicistas, no nos interesan". En su lugar, el t¨¢ndem Correa-Mil¨¤ proyect¨® un edificio que, seg¨²n ellos, se mezclar¨¢ en el entorno puesto que, a pesar de su modernidad, mantiene rasgos de la arquitectura tradicional vicense: ventanas sin correspondencia vertical, muros irregulares y fachadas de piedra."Creemos que hemos hecho un museo al servicio de la obra", dice Correa cuando describe para qu¨¦ servir¨¢ cada uno de los rincones y los ¨¢ngulos que se dibujan sobre los planos. ?ngulos y rincones que no son una arbitrariedad, sino el resultado de tener que trabajar en un solar delimitado por irregulares callejuelas medievales que en alg¨²n tramo apenas superan los dos metros de ancho.

El nuevo edificio estar¨¢ constituido por una planta baja, tres pisos y un subterr¨¢neo de una media de cuatro metros de altura. El acceso se realizar¨¢ a trav¨¦s de un vest¨ªbulo de cerca de nueve metros de altura. Eso permitir¨¢ que por una apertura lateral se pueda contemplar, como una obra m¨¢s del museo, el impresionante campanario rom¨¢nico de la catedral de Vic. En la planta baja se podr¨¢ visitar la colecci¨®n de rom¨¢nico y una parte del g¨®tico, y en ella se han previsto dos espacios de doble altura para albergar los ¨¢bsides rom¨¢nicos y el famoso retablo de Santa Clara, que en el antiguo museo se expon¨ªa desmontado por falta de paredes suficientemente altas.

En la primera planta estar¨¢ la segunda parte del g¨®tico, a partir del siglo XVI, algunas pinturas del siglo XVII y XVIII, y dos grandes espacios destinados a la indumentaria lit¨²rgica y al vidrio. La segunda planta se destinar¨¢ a las colecciones de orfebrer¨ªa, cuero y cer¨¢mica. Adem¨¢s habr¨¢ un espacio llamdo Galer¨ªas de Estudio que contendr¨¢ todas las obras que "no sean de primerisima calidad", explica Correa. En la tercera planta del museo se instalar¨¢n las oficinas y los talleres de restauraci¨®n. El s¨®tano albergar¨¢ la colecci¨®n de arqueolog¨ªa. Entre las joyas que esconde la colecci¨®n del Museo Episcopal de Vic se encuentran las composiciones pict¨®ricas y escult¨®ricas que decoraban las iglesias rom¨¢nicas de Osona y sus comarcas lim¨ªtrofes. Pero lo que realmente distingue el museo vicense de otros escenarios, como el Museo Nacional de Arte de Catalu?a, son sus colecciones de indumentaria lit¨²rgica y los objetos de orfebrer¨ªa. El museo ser¨¢ gestionado por una junta formada por el Obispado de Vic, el Ayuntamiento y la Generalitat. Esta ¨²ltima instituci¨®n ha sido la encargada de costear las obras, que se presupuestaron en unos 1.500 millones de pesetas.

Cuando, hace cinco a?os, se empez¨® a trabajar en el proyecto, nada hac¨ªa pensar que ¨¦ste se instalar¨ªa en un edificio de nueva planta. En principio, los arquitectos Correa y Mil¨¤ se comprometieron a respetar el antiguo edificio de La Panissa. La humedad y la falta de espacio fueron los motivos que, finalmente, llevaron la piqueta al antiguo museo. Adem¨¢s Correa no esconde que, en su opini¨®n, el antiguo edificio "era feo". El derrocamiento origin¨® una protesta ciudadana en Vic.