El Gobierno cree que s¨®lo se trata de "vender mercanc¨ªa falsa"

El Gobierno central cree que la nueva ronda de contactos del lehendakari, Juan Jos¨¦ Ibarretxe, con los partidos para formar otra mesa de di¨¢logo en Euskadi "s¨®lo sirve para vender mercanc¨ªa falsa, para enredarse en cuestiones de m¨¦todo y no afrontar el cambio de rumbo" que el presidente, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, reclam¨® al PNV en su intervenci¨®n en La Moncloa de hace diez d¨ªas.Un "cambio de rumbo" que Aznar resumi¨® en el abandono por parte del PNV de la estrategia de Lizarra y su regreso al consenso del Estatuto de Gernika para terminar con la legitimidad que el nacionalismo democr¨¢tico est¨¢ dando a ETA.

"Si el lehendakari expresa su voluntad de regresar al consenso del Estatuto, que es la clave, las cuestiones de m¨¦todo, como el foro de partidos, se resuelven en dos minutos", reiteraron ayer fuentes de La Moncloa.

El Ejecutivo sigue con "preocupaci¨®n" y "cautela" los movimientos del lehendakari. Con "cautela", para no arruinar la entrevista concertada para pasado ma?ana, jueves, entre Aznar e Ibarretxe en La Moncloa, por lo que la dureza de las cr¨ªticas se la ha dejado a los dirigentes del PP vasco. Con "preocupaci¨®n", porque teme que la creaci¨®n de la nueva mesa de di¨¢logo valga al PNV "para atrincherarse, ganar tiempo y evitar dar el cambio que se le pide, el abandono de Lizarra".

S¨®lo en Durango

"Hasta el momento, el PNV s¨®lo ha roto su acuerdo con EH en el Ayuntamiento de Durango (Vizcaya). No ha dado ning¨²n paso m¨¢s despu¨¦s de que algunos de sus m¨¢s significativos cargos p¨²blicos anunciaran la ruptura con EH y Lizarra", insisten en La Moncloa.

El Gobierno est¨¢ convencido de que las formaciones no nacionalistas deben mantener la presi¨®n sobre el PNV para que cambie. En este sentido, cree que es una "t¨¢ctica equivocada" del PSE la de acordar un foro de partidos con cierta rebaja de exigencias para su participaci¨®n, como "el rechazo de la violencia" en vez de "la condena de la violencia" o la exigencia de "aceptar la legalidad vigente", m¨¢s ambigua que "la aceptaci¨®n del Estatuto".

Pero en La Moncloa no preocupa tanto el juego de palabras. A fin de cuentas, los aspectos pactados por el PSE y el PNV no los aceptan los dem¨¢s partidos, a excepci¨®n de IU y UA, con lo que la mesa no va a ser operativa en esas condiciones. Lo que preocupa, sobre todo, es "el movimiento t¨¢ctico" que han efectuado los socialistas. "Tiene el efecto negativo de rebajar la presi¨®n sobre el PNV en un momento decisivo y abrir adem¨¢s un camino de ambig¨¹edades sobre los propios contenidos de esa exigencia", se precisa.

Lo "decisivo" del momento viene dado por la pr¨®xima entrevista de Aznar e Ibarretxe. El presidente ha emplazado al lehendakari a que el jueves exprese su actitud ante el reclamado "cambio de rumbo" del PNV.