Los agujeros del cintur¨®n

El Ministerio de Sanidad tiene su crecimiento presupuestario limitado. As¨ª lo advirti¨® el vicepresidente segundo de Gobierno, Rodrigo Rato, en plena crisis de las listas de espera. Entonces, lejos de ceder a la tentaci¨®n de anunciar una inyecci¨®n especial que aliviase las demoras hospitalarias, Rato record¨® que el actual presupuesto del Ministerio de Sanidad (4,4 billones de pesetas) era suficiente. La firmeza de Rato, avalada posteriormente por el Palacio de la Moncloa, oblig¨® a la ministra Celia Villalobos a reconocer que su plan de reducci¨®n de listas de espera en cirug¨ªa cardiaca no iba a contar con dinero extra. "Tendremos que apretarnos el cintur¨®n por otro lado", remach¨® Villalobos.Ese "otro lado" constituye a¨²n una inc¨®gnita. Aunque Villalobos ha empezado a escarbarse los bolsillos, el cintur¨®n es muy corto y nadie sabe a ciencia cierta de d¨®nde obtendr¨¢ los fondos necesarios para llevar adelante una reforma que la propia ministra espera extender a las listas de espera de todas las patolog¨ªas. Una de las pocas l¨ªneas de financiaci¨®n apuntadas por Villalobos procede del ahorro que supuestamente liberar¨¢n los gen¨¦ricos. Mediante esos medicamentos, cuyo coste es menor dado que su patente ha expirado, el Gobierno espera desacelerar el incremento del gasto farmac¨¦utico, cifrado en un bill¨®n en 1999. Sin embargo, el crecimiento registrado por esta partida en a?os anteriores (cercano al 10%) arroja dudas sobre su viabilidad. Los centros de investigaci¨®n de ¨¦lite pueden convertirse en los agujeros que le faltan al cintur¨®n.