Delirio en las calles de Bucarest
Rumania entera lleg¨® al delirio con la clasificaci¨®n de su equipo para los cuartos de final de la Eurocopa. El punto ¨¢lgido se alcanz¨® en Bucarest, la capital, como ha sido habitual en los ¨¦xitos del deporte rumano. M¨¢s de 30.000 personas, hombres y mujeres, j¨®venes y ancianos, muchos de ellos con ni?os peque?os en los brazos, se lanzaron a las calles para acabar reuni¨¦ndose en el centro de la ciudad y celebrar la primera vez que su selecci¨®n alcanza una clasificaci¨®n as¨ª en la Eurocopa.Banderas rumanas con los colores azul, amarillo y rojo al viento y sobre los hombros, o las caras pintadas con los mismos tonos, fueron multitud. Miles de personas tambi¨¦n les esperaban en la plaza de la Revoluci¨®n desde la que hab¨ªan presenciado el partido retransmitido por televisi¨®n en una pantalla gigante.
Apenas un cuarto de hora despu¨¦s del final del encuentro, la plaza de la Universidad, punto neur¨¢lgico de la ciudad, se encontraba ya bloqueada por aficionados que expresaban su alegr¨ªa por el triunfo.
Bocinas de autom¨®viles sonando, luces por todas partes, coches cargados de hinchas y toda la parafernalia t¨ªpica de estos casos se volc¨® en la misma plaza universitaria escenario de las hist¨®ricas manifestaciones contra la dictadura comunista de Nicolae Ceaucescu, en 1989.
"Les hemos ganado sin Hagi, va por Hagi", gritaban un grupo de j¨®venes. "Italia va a ser un simple bocado", segu¨ªan vociferando otros, que anunciaban ya la disposici¨®n de todo el pa¨ªs para afrontar el siguiente d¨ªf¨ªcil compromiso, ya a cara o cruz (como en realidad acab¨® siendo el partido contra Inglaterra), ahora ya en cuartos de final.
Pero no s¨®lo se hac¨ªan referencias a los ganadores. En una noche ya avanzada (el encuentro termin¨® en Rumania pasada la medianoche, ya d el mi¨¦rcoles) la alegr¨ªa desbordante se dedic¨® tambi¨¦n a agradecer otros detalles. Porque si Alemania hubiera ganado a Portugal por m¨¢s de un gol no le habr¨ªa servido de nada a Rumania la victoria sobre Inglaterra. Entonce habr¨ªan pasado los alemanes. "Gracias Portugal, gracias Portugal", voceaban los habitantes de un barrio popular al norte de Bucarest. Era sintom¨¢tico. Todo un simbolismo de uni¨®n entre los pobres que hab¨ªan podido esta vez con los ricos.
En Iasi, una ciudad al norte del pa¨ªs, m¨¢s de 10.000 aficionados cortaron el centro y en las restantes poblaciones importantes de Rumania, como Cluj, Brasov, Timisoara o Constanza, las celebraciones tambi¨¦n se hicieron oir. Rumania vibr¨®.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.