Los Verdes alemanes aprueban el acuerdo para cerrar las nucleares

Los Verdes, socios menores en la coalici¨®n gubernamental alemana, aprobaron ayer el acuerdo alcanzado por el Ejecutivo con la industria nuclear para cerrar las 19 centrales hoy operativas, cuando cumplan 32 a?os de funcionamiento. La decisi¨®n aleja el peligro de ruptura en el Gobierno.Un 64% de los m¨¢s de 600 delegados participantes en el congreso nacional del partido ecologista en M¨¹nster vot¨® a favor del acuerdo: concretamente, 433. En contra, 227. Se abstuvieron 9.

El acuerdo, producto de casi dos a?os de negociaciones con los grandes grupos industriales RWE, Veba, Viag y Vew, result¨® un trago amargo para muchos militantes, al conceder un plazo muy largo para el cierre de centrales. "No hemos luchado tres d¨¦cadas contra la energ¨ªa nuclear para ahora constatar su deceso por muerte natural", sentenci¨® ayer un grupo de 100 delegados que abog¨® por rechazar el cierre negociado por el ministro verde de Medio Ambiente, J¨¹rgen Trittin.

Los adversarios de la soluci¨®n consensuada -muchos de ellos del ala izquierda del partido- citaron una serie de concesiones a las empresas. El acuerdo prev¨¦ que las compa?¨ªas a¨²n podr¨¢n generar 2.625 tetravatios nucleares, m¨¢s que todo lo generado desde que la primera central se inaugurara en 1969.

Este monto podr¨¢ ser repartido por las el¨¦ctricas entre las distintas centrales, con lo que ser¨¢n las compa?¨ªas quienes decidan la fecha de cada cierre. "Incluso la industria escribe en su bolet¨ªn: 'El futuro de la energ¨ªa nuclear sigue abierto'", critic¨® Antje Radcke, una de las dos presidentes del partido. Ni Trittin ni la gran mayor¨ªa de la ejecutiva aceptaron esos argumentos. "Es un punto de quiebra hist¨®rico", afirm¨® Trittin en un debate ins¨®litamente calmo.

En las ¨²ltimas 13 elecciones regionales y nacionales, Los Verdes han perdido votos. Parte del problema es que el abandono de las posiciones maximalistas diluye su identidad ante el electorado.

Trittin, que reconoci¨® el c¨¢racter "dif¨ªcil" del acuerdo, dio la vuelta a los c¨¢lculos de los esc¨¦pticos al se?alar: "Como media, cada una de las centrales seguir¨¢ funcionando 13 a?os. Dentro de 20 habremos cerrado la inmensa mayor¨ªa de las nucleares. Tenemos que dejar de encontrar peros a nuestros propios ¨¦xitos".

Fischer

A juicio de los aplausos para uno y otro bando, una estrecha mayor¨ªa parec¨ªa dar raz¨®n a los argumentos de quienes creen que el acuerdo desincentivar¨¢ tambi¨¦n a escala europea la energ¨ªa nuclear. "Lo que se ha negociado crea lo que las compa?¨ªas m¨¢s odian: la incertidumbre sobre el futuro de su negocio", afirm¨® un orador invitado del partido Verde belga.

El ministro verde de Exteriores, Joschka Fischer, hizo la advertencia de que "pedir nuevas negociaciones equivale a romper la coalici¨®n de Gobierno. Hemos alcanzado lo m¨¢ximo que hemos podido, y estoy harto de que nos dediquemos a desmentirnos a nosotros mismos". Fischer acababa de llegar de Ucrania, donde en 1986 se registr¨® en la central de Chern¨®bil el peor accidente nuclear hasta la fecha.

Ya hace un a?o, Los Verdes tuvieron que aceptar a rega?adientes la participaci¨®n alemana en la guerra de Kosovo, lo que entraba en ruptura con otro de sus pilares fundamentales, el pacifismo.