Esto es poco serio

Parece incre¨ªble que con unos toros sin ninguna complicaci¨®n y con un riesgo bastante ¨ªnfimo por la comodidad de los pitones, Manuel Caballero estuviera ayer tan displicente y sin ganas. Tore¨® a sus dos toros con las dos manos, a base de naturales y derechazos, ligando unas veces y otras sin ligar. En todo momento da la impresi¨®n de que le ven¨ªa ancha la corrida de ayer. Es como si no quisiera estar, como si s¨®lo le importara cobrar la cifra estipulada y largarse hacia su casa. No es manera de comportarse si se quiere estar en primera figura del toreo.Manuel D¨ªaz, El Cordob¨¦s, peg¨® un mitin en el sentido de mostrar una falta de sitio, un exceso de precauciones, una inseguridad supina. Salvo unos buenos lances a su segundo toro, el resto de su actuaci¨®n fue un fiasco. Para colmo, cuando en ese segundo toro, despu¨¦s de torear de manera vulgar y desconfiada, ech¨® mano del consabido salto de la rana. Fue pat¨¦tico. Demostr¨® que como no pod¨ªa con ese bravo toro utiliz¨®, insistimos, ese recurso facil¨®n. Hubo un momento en que, despu¨¦s de tirar el estoque y la muleta, trat¨® de hacer un desplante al toro, pero era tanta su inseguridad que, en vez de poner el pecho abierto al toro de rodillas, le sali¨® un desplante de cuclillas. Cosa m¨¢s pat¨¦tica y menos torera hac¨ªa mucho tiempo que no ve¨ªamos.

Creemos que Eugenio de Mora puso de su parte lo m¨¢s enjundioso y pretendidamente torero. En su primero instrument¨® naturales de gran empaque, largos y templados, aunque no demasiado ligados. Lamentablemente, mat¨® muy mal. En su segundo tore¨® a la ver¨®nica, bastante aseadito. Tuvo un inicio de faena con las dos rodillas en tierra, pero llevando al toro toreado. Luego, no estuvo demasiado fino por naturales y derechazos. El Cordob¨¦s y Eugenio de Mora salieron a hombros. Un horror.