La polic¨ªa de Irlanda del Norte se prepara para la 'batalla de Drumcree'

Adams y Mandelson

Tropas brit¨¢nicas fueron desplegadas ayer para reforzar las medidas de seguridad en el Ulster. Ingenieros del Ej¨¦rcito construyeron un muro de contenci¨®n en el puente de Drumcree, la zona donde el domingo se celebrar¨¢ el desfile de la Orden unionista de Orange, con el fin de prevenir incidentes. El hecho de la que polic¨ªa del Ulster levantara otra barricada frente a la iglesia de Drumcree, desde donde el domingo partir¨¢ este desfile orangista, demuestra que todos se preparan para afrontar una verdadera batalla. Ronnie Flanagan, jefe de la polic¨ªa del Ulster, asegur¨® anoche a la BBC, que la situaci¨®n dista de estar controlada. "Disponemos de informaciones preocupantes que indican que alguna gente de mal planea efectuar ataques contra mis hombres, incluyendo el uso de explosivos".

Casi al mismo tiempo que realizaba estas declaraciones, la polic¨ªa antidisturbios, apoyada por veh¨ªculos blindados, logr¨® poner en fuga a un grupo de 60 j¨®venes unionistas enmascarados que se hab¨ªan apoderado de un autob¨²s cerca del centro de Belfast, y con el que trataban de organizar una barricada. Otros manifestantes, enfurecidos por la decisi¨®n de impedir el paso del desfile orangista a trav¨¦s del barrio cat¨®lico de Portadown, la emprendieron contra los veh¨ªculos aparcados, destrozando adem¨¢s el mobiliario urbano.

Es la primera vez en 30 a?os, que este cuerpo de polic¨ªa del Ulster, en su mayor¨ªa compuesto por protestantes, se enfrenta con radicales unionistas en las calles de Irlanda del Norte. Ayer, por cuarto d¨ªa consecutivo, se repitieron los violentos choques entre agentes y manifestantes.

Gerry Adams, presidente del Sinn Fein, el brazo pol¨ªtico del IRA, calific¨® la situaci¨®n de muy delicada, y record¨® que peligran las vidas de quienes participen en las refriegas.Antes de que la Comisi¨®n de Desfiles prohibiera a la Orden de Orange atravesar el barrio cat¨®lico de Garvaghy Road, Londres hab¨ªa enviado al Ulster 2.000 soldados como refuerzo. La polic¨ªa norirlandesa cuenta a su vez con 25.000 agentes de servicio. El temor de sus jefes y del propio Gobierno brit¨¢nico es que ambos se vean obligados a actuar.

"La violencia, el acoso y la intimidaci¨®n no servir¨¢n para cambiar la decisi¨®n de la Comisi¨®n de Desfiles", dijo ayer Peter Madelson, ministro para Irlanda del Norte. Sus palabras fueron refrendadas por el ex senador estadounidense George Mitchell, mediador de los acuerdos de Viernes Santo. "La reconciliaci¨®n es la ¨²nica v¨ªa de soluci¨®n en este conflicto", asegur¨®. Para Harold Grace, jefe del distrito de Portadown de la Orden de Orange, la culpa de los disturbios la tiene la intransigencia de Mandelson y de la Comisi¨®n.