Noche de ritmo

La noche africana del Grec en el Poble Espanyol se sald¨® con un balance muy positivo. Dos de las grandes voces del continente negro compart¨ªan un cartel que promet¨ªa mucho y que, con toda seguridad, no decepcion¨® a nadie. Sobre el escenario, Salif Keita ejerci¨® de gran maestro, Youssou N'Dour represent¨® su papel de alumno aventajado y con un amplio sentido de la comercialidad al gusto occidental.Abri¨® la noche Salif Keita. Pod¨ªa haber sido al rev¨¦s ya que a ninguno de los dos artistas le encajaba el papel de telonero, pero posiblemente el mayor peso de la multinacional de Youssou N'Dour y el hecho de tener un disco m¨¢s reciente en el mercado pesase en el orden. El ambiente estaba caldeado y casi ni se not¨® el retraso de una hora con que comenz¨® la velada por culpa de una mesa de control de sonido que decidi¨® morirse incendiada poco antes de la hora de inicio anunciada.

Salif Keita volvi¨® a cautivar con su portentosa voz. Temas de fuerte contenido r¨ªtmico con largos tratamientos instrumentales a veces cercanos al jazz o al blues sobre los que el pr¨ªncipe albino pudo explayarse a placer y mostrar sus excelentes dotes de comunicador. Un concierto redondo en el que s¨®lo falt¨® algo de empaque instrumental y que concluy¨® con un estremecedor solo de Keita acompa?¨¢ndose a la kora.

Youssou N'Dour apost¨® por la parcela m¨¢s extrovertida de su repertorio. Con un potencial musical mayor que el de su antecesor, m¨¢s y mejores m¨²sicos, construy¨® melod¨ªas de m¨¢s pegada, m¨¢s directas, m¨¢s f¨¢ciles de retener y de bailar. Y una buena parte del p¨²blico estaba all¨ª precisamente para eso. Su voz tambi¨¦n brill¨® alto, pero sin llegar a los extremos de ductilidad y comunicabilidad de Keita, aunque que N'Dour sabe jugar con ella para pasar de un ambiente a otro con suma facilidad.

Fue una noche tremendamente r¨ªtmica y colorista, pero sin caer en ning¨²n momento en los abundantes t¨®picos de la m¨²sica africana actual, la mayor¨ªa de ellos copiados de estos dos artistas con may¨²scula.