M¨¢s de 1.500 personas se re¨²nen contra ETA en ?greda

M¨¢s de 1.500 personas se concentraron ayer en la plaza mayor de ?greda para mostrar su repulsa a la violencia tras el atantado con coche bomba perpetrado por ETA el domingo contra la casa cuartel de la localidad soriana. La protesta, encabezada por el ministro de Administraciones P¨²blicas, Jes¨²s Posada, y en la que participaron parlamentarios populares y socialistas, diputados auton¨®micos y provinciales, y alcaldes de la provincia, transcurri¨® en silencio. S¨®lo al final, un vecino de ?greda ley¨® un comunicado en el que se insisti¨® en la sinraz¨®n de la violencia: "Sentimos incredulidad, impotencia, rabia... Rechazamos con toda la fuerza de la raz¨®n la intolerancia, la violencia y la muerte como armas para defender cualquier planteamiento".Posada acompa?¨® al ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, en su visita a la casa cuartel junto a la que ETA coloc¨® el coche.bomba. La visita, en la que les acompa?aron el director de la Guardia Civil, Santiago L¨®pez Valdivielso y el Secretario de Estado para la Seguridad Pedro Moren¨¦s, entre otras personalidades, ten¨ªa como objetivo "dar ¨¢nimos a los miembros de la Guardia Civil del acuartelamiento de ?greda", seg¨²n dijo Mayor, pero el ministro asegur¨® que se hab¨ªa producido la situaci¨®n inversa: "Ellos nos han dado ¨¢nimos a nosotros, muy especialmente sus familias, sus mujeres, que reponi¨¦ndose a¨²n del susto tan terrible, sin embargo mantienen una serenidad admirable, y lo mismo hay que decir de los vecinos de ?greda".

Estrella Ruiz, la esposa de un guardia civil que fue la ¨²nica herida en el atentado, evoluciona favorablemente tras la operaci¨®n de p¨¦rdida de sustancia a la que fue sometida en su pierna derecha. Fue dada de alta a mediod¨ªa de ayer.

Vuelta a la normalidad

Los vecinos estuvieron desde primera hora comprobando los da?os causados por el coche bomba. Algunos no han dormido en sus domicilios, entre ellos varios agentes residentes en la casa-cuartel. Al amanecer comenzaron su tarea las brigadas de limpieza, con lo que a mediod¨ªa los ¨²nicos rastros visibles del atentado del domingo eran un veh¨ªculo destrozado y unas casas sin ventanas y con las paredes llenas de metralla. Alba?iles, cerrajeros, cristaleros y carpinteros se afanaban por las calles de ?greda tomando medidas y encaramados a escaleras. Todav¨ªa queda mucho por hacer, pero el susto va pasando. Como dicen los agrede?os "el nudo en el est¨®mago se va deshaciendo".Por otra parte, las ¨²ltimas indagaciones respecto al coche bomba apuntan a que conten¨ªa tres ollas con entre 25 y 30 kilos de explosivo sin determinar, y que la carga explosiva estaba orientada hac¨ªa las viviendas de los guardias civiles.