La direcci¨®n de EA vetar¨¢ un apoyo incondicional de Arana a Elorza en el Ayuntamiento donostiarra

La direcci¨®n nacional de Eusko Alkartasuna (EA) no ha opuesto resistencia a la decisi¨®n de sus cuatro concejales donostiarras de romper la coalici¨®n que manten¨ªan con el PNV en el Ayuntamiento de San Sebasti¨¢n, pero tampoco autorizar¨¢ que su portavoz municipal, Enrique Arana, d¨¦ ahora un apoyo incondicional al alcalde, el socialista Od¨®n Elorza, en materias de gran relevancia para la ciudad. La direcci¨®n que encabeza Bego?a Errazti se opone a un hipot¨¦tico acuerdo de Arana para lo que resta de mandato con el equipo de gobierno, formado por PSE-EE y Partido Popular. Antes de todo, EA debe resolver si puede mantener un grupo con sus propias siglas o sus ediles pasan al grupo mixto.

El parlamentario y responsable de Comunicaci¨®n de EA en Guip¨²zcoa, I?aki Galdos, asegur¨® a este peri¨®dico que la direcci¨®n de su partido "no autorizar¨¢ el apoyo a Elorza en decisiones transcendentales" para el Ayuntamiento donostiarra y descart¨® de plano un hipot¨¦tico acuerdo con socialistas y populares para los tres a?os que restan de mandato. Galdos confirm¨® que "las cosas van a seguir como est¨¢n", con la salvedad hecha de "la divisi¨®n en dos de la coalici¨®n" nacionalista.EA seguir¨¢ haciendo oposici¨®n a Elorza, seg¨²n el dirigente del partido, quien descarta un giro brusco en la estrategia que han seguido hasta ahora sus ediles donostiarras. Mantendr¨¢n pues su posici¨®n cr¨ªtica al equipo de gobierno PSE-PP, pese a que en las ¨²ltimas semanas los nacionalistas han apoyado a Elorza en la aprobaci¨®n de un controvertido plan de vivienda protegida en Contadores y del programa de Normalizaci¨®n del Uso del Euskera para los funcionarios municipales.

La actitud futura de EA en el consistorio es una inc¨®gnita que aflor¨® en cuanto se supo su intenci¨®n de romper la coalici¨®n con el PNV. El desenlace es el fruto de muchos meses planeando la divisi¨®n. Ning¨²n representante del partido de Bego?a Errazti ha explicado a¨²n las razones reales de la ruptura entre nacionalistas. S¨®lo se aduce que la relaci¨®n con los concejales peneuvistas "es muy buena" y que la creaci¨®n de dos grupos separados figura en el apartado 1.2 del acuerdo de coalici¨®n con el que concurrieron a las pasadas municipales, donde consta que ambas formaciones concurren conjuntamente a las instituciones, "donde conservar¨¢n su personalidad propia y grupo, para hacerlo posible, aplic¨¢ndose en cada instituci¨®n la f¨®rmula m¨¢s id¨®nea".

Eusko Alkartasuna tiene ahora m¨¢s urgencia en aclarar definitivamente su situaci¨®n como grupo en el Ayuntamiento. La decisi¨®n de disolver la alianza le obliga, seg¨²n establece el reglamento org¨¢nico municipal, a formar un grupo mixto con sus cuatro concejales, si bien Arana ha solicitado personalmente a Elorza que modifique la ordenanza para que EA pueda constituirse como grupo propio. Este tr¨¢mite deber¨¢ esperar hasta septiembre, dado que requiere el respaldo mayoritario del pleno.

La partici¨®n de la coalici¨®n EA-PNV, con siete ediles todav¨ªa (cuatro de EA y tres peneuvistas), acarrea consecuencias de peso para el reparto de cargos en los organismos municipales, as¨ª como en la configuraci¨®n pol¨ªtica en el consistorio. El PP, con seis concejales, tres menos que el grupo socialista, pasa a ser la segunda fuerza en la ciudad. Euskal Herritarrok, con cinco representantes, se coloca tercera, seguido de EA, con cuatro, y del PNV, con tres ediles.

Esta composici¨®n echa por tierra la asignaci¨®n proporcional que adopt¨® Elorza para que todos los grupos tuviesen representaci¨®n en las sociedades y patronatos municipales: el Kursaal, la Compa?¨ªa del Tranv¨ªa, el Festival de Cine o los patronatos de Vivienda y Cultura, entre otros. Euskal Herritarrok ya ha reclamado una revisi¨®n del reparto de puestos porque es la tercera fuerza, por delante de EA.