Muere el peri¨®dico 'L'Unit¨¤', s¨ªmbolo de la izquierda italiana

El diario L'Unit¨¤, que durante 76 a?os ha sido un punto de referencia para la izquierda, se despidi¨® ayer de sus lectores. Y lo hizo con una portada en la que aparec¨ªa, sobre un rebosante fondo blanco, una foto del primer n¨²mero del peri¨®dico creado por Antonio Gramsci, una de las grandes figuras del Partido Comunista Italiano. "?Ten¨ªamos que terminar justamente as¨ª?", se preguntaba en su editorial.

En su carta de despedida, el ¨²ltimo director del peri¨®dico, Giuseppe Caldarola, asegura que el final de L'Unit¨¤ es "un drama para la izquierda". A?ade que "si no hay un revulsivo, si la izquierda no encuentra su propia raz¨®n de ser, el caso de L'Unit¨¤ se convertir¨¢ en la base de otros dramas".El diario fundado en 1924 por Antonio Gramsci y Palmiro Togliatti ha acumulado en los ¨²ltimos tres a?os una deuda de m¨¢s de 35 millones de euros (5.800 millones de pesetas) y no ha conseguido superar una situaci¨®n econ¨®mica caracterizada por la p¨¦rdida de m¨¢s de 250 millones de pesetas diarios.

L'Unit¨¤ tampoco ha logrado remontar unas ventas que en los ¨²ltimos a?os cayeron hasta los 50.000 ejemplares. En los a?os setenta, durante su ¨¦poca dorada, lleg¨® a imprimir tres ediciones con m¨¢s un mill¨®n de copias en ocasiones. Y ha sido el m¨¢s s¨®lido exponente de la prensa de partido en Europa. Pero, sobre todo, el peri¨®dico que sobrevivi¨® a las persecuciones del fascismo y a la excomuni¨®n indirecta del Vaticano, no ha sabido vencer la crisis de identidad por la que atraviesa la izquierda italiana.

En su ¨²ltimo n¨²mero, el hist¨®rico rotativo recogi¨® algunas de las p¨¢ginas m¨¢s sobresalientes de este siglo, tanto en Italia como en el resto del mundo: el secuestro de Aldo Moro por las Brigadas Rojas en 1978 -una noticia encabezada con t¨ªtulo Los enemigos de la democracia no pasar¨¢n- o el Addio -que ocup¨® un cuarto de p¨¢gina- a Berlinguer, uno de los l¨ªderes hist¨®ricos del PCI.

Otras de las p¨¢ginas reeditadas tienen como referencia la ca¨ªda del muro de Berl¨ªn (El d¨ªa m¨¢s bello de Europa, rezaba su titular) y el fin de la Uni¨®n Sovi¨¦tica (El final del gran sue?o).

En los ¨²ltimos suspiros del rotativo, el ex primer ministro M¨¢ximo D'Alema visit¨® la redacci¨®n y dio ¨¢nimo a los trabajadores. Tambi¨¦n el presidente italiano, Carlo Arzeglio Ciampi, se sum¨® al coro de voces que lloraron la muerte de L'Unit¨¤. "Es un punto de referencia pol¨ªtico importante para Italia, que desaparece" dijo. Pero los m¨¢s 200.000 euros (33 millones de pesetas) en donaciones recibidos en el ¨²ltimo d¨ªa tampoco evitaron su defunci¨®n.

El diario, ya privatizado, podr¨ªa salir de nuevo a la calle en el oto?o pr¨®ximo, pero de los 184 periodistas que actualmente integran su redacci¨®n, deber¨ªan quedar medio centenar. Con gran escepticismo, el secretario de la organizaci¨®n de los periodistas italianos, Paolo Serventi Longhi, dijo ayer que "no hay empresarios interesados". Para no perder del todo el contacto con el p¨²blico, los trabajadores esperan que L'Unit¨¤ siga viviendo mediante una edici¨®n en Internet.