El bajo nivel deja sin ganador por primera vez el concurso de direcci¨®n orquestal de Cadaqu¨¦s

Dura e in¨¦dita fue la decisi¨®n del jurado de la quinta edici¨®n del Concurso Internacional de Directores de Orquesta de Cadaqu¨¦s (Girona). Dej¨® que el viernes por la noche el alem¨¢n Christoph Mueller y el canadiense Charles Olivieri-Munroe se enfrentaran en la prueba final, donde uno de ellos deb¨ªa obtener el codiciado premio de dirigir a 18 orquestas sinf¨®nicas y embolsarse un mill¨®n de pesetas, para declarar a medianoche desierto el galard¨®n y conceder a Mueller el segundo premio, un bonito diploma con los aut¨®grafos del jurado. Al anunciar el fallo, el director de orquesta brit¨¢nico Neville Marriner, presidente de jurado, aleg¨® un bajo nivel y la necesidad de elevar el est¨¢ndar de calidad.

"Cuando el italiano Gianandrea Noseda gan¨® el concurso en la segunda edici¨®n, en 1994, marc¨® el est¨¢ndar de calidad. A lo largo de la historia de este certamen hemos vistos j¨®venes con gran talento, pero en esta edici¨®n no podemos conceder el premio a ninguno de los dos finalistas. Es una decisi¨®n que el jurado ha tomado por unanimidad al considerar que ninguno de ellos ha demostrado que est¨¢ preparado para merecer la oportunidad de dirigir a 18 conjuntos sinf¨®nicos sin poner en peligro la reputaci¨®n del concurso", explic¨® Neville Marriner.At¨®nitos, Christoph Mueller y Charles Olivieri-Munroe escucharon frente al altar barroco de la iglesia de Cadaqu¨¦s el veredicto y la decisi¨®n de conceder el segundo premio a Mueller. "De los dos, es el que ha mostrado un personalidad m¨¢s destacada", dijo Marriner ante el p¨²blico que llen¨® el templo en la prueba final, en la que los dos finalistas dirigieron a la Orquesta de Cadaqu¨¦s y un concierto con el que se inaugur¨® la 29? edici¨®n del festival de m¨²sica cl¨¢sica que se celebra en verano en esta poblaci¨®n de la Costa Brava.

El director brit¨¢nico explic¨®, para escaso consuelo de Olivieri-Munroe -Mueller desapareci¨® durante m¨¢s de 45 minutos y cuando volvi¨® a dejarse ver mostraba un semblante grave-, que a juicio del compositor Leonardo Balada (Barcelona, 1933), miembro tambi¨¦n del jurado, Mueller era quien mejor hab¨ªa dirigido Passacaglia, la obra que hab¨ªa compuesto el m¨²sico para que los dos finalistas la estrenaran en la prueba final del concurso, ¨²nico de esta especialidad en Espa?a.

Balada, sin embargo, explic¨® a este diario que ni Olivieri-Munroe ni Mueller hab¨ªan sabido "solucionar un problema t¨¦cnico referente a los tempi" que presenta la partitura. "Por la tarde, en el ensayo, se les dio pistas para hallar el problema y solucionarlo, pero ninguno lo ha sabido resolver", dijo el compositor.

Lloren? Caballero, fundador y director del concurso, asegur¨® que la exigencia del certamen es cada vez mayor. "La Orquesta de Cadaqu¨¦s ha alcanzado un gran prestigio y no podemos dar el premio a alguien a quien el conjunto despu¨¦s no contratar¨ªa para dirigir un concierto. Adem¨¢s somos responsables ante las 18 orquestas [16 espa?olas, la Fundaci¨®n Gulbenkian de Lisboa y la Orquesta de C¨¢mara de Viena] de la calidad del ganador que despu¨¦s las tiene que dirigir".

A la quinta edici¨®n del concurso se presentaron 177 solicitudes de 34 pa¨ªses, de las que se seleccionaron 42 para pasar las pruebas. Adem¨¢s de su presidente, Neville Marriner, integraban el jurado Adrian Leaper, director art¨ªstico de la Orquesta Filarm¨®nica de Gran Canaria; Leornado Balada; el director Gianandrea Noseda, y la propia Orquesta de Cadaqu¨¦s.