EL ENFADO DE BLAIR

"La no-foto de Leo", proclamaba ayer The Independent On Sunday en su cobertura del bautizo del peque?o de los Blair. La cara del beb¨¦, la nueva estrella de Downing Street, no aparec¨ªa en la instant¨¢nea. Quedaba fuera de marco, bloqueada por la cabeza de uno del m¨¢s de un centenar de invitados a una ceremonia que sus padres quisieron mantener en privado. Otros medios prescindieron de sutilezas o gestos burlescos y publicaron en portada sendas fotograf¨ªas de Leo, nacido el pasado 20 de mayo, en brazos de sus padres. "?sta es la imagen que Tony Blair no quiere que veais", titul¨® The Sunday Times. El primer ministro ha elevado su protesta a la Comisi¨®n de Quejas a la Prensa, cuyo c¨®digo voluntario exige a los directores de tabloides y rotativos de calidad solicitar permiso paterno antes de publicar im¨¢genes de los menores de edad. "El primer ministro y los ni?os de Cherie Blair no quieren entrar en una situaci¨®n en la que cada vez que salen [a la calle] es un acontecimiento medi¨¢tico", se?al¨® el portavoz de Blair. "Los padres no dieron permiso y adem¨¢s advirtieron de que el bautizo era absolutamente privado y objetar¨ªan a su publicidad", continu¨® justificando el malestar de los Blair. Al igual que sus tres hermanos mayores, el sacerdote cat¨®lico John Caden, asistido por el vicario protestante Martin King, bautiz¨® a Leo el s¨¢bado en una iglesia de Sedgefield, distrito electoral del primer ministro brit¨¢nico, situado al norte de Inglaterra. Intervinieron como padrinos una amiga de la infancia de Cherie y un viejo amigo de Blair, al que conoci¨® en sus a?os de colegio en Edimburgo. Posteriormente, los invitados celebraron en un restaurante pr¨®ximo el sacramento.-