Los mochos y la guayabera

Como Carlos Vives, Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez creci¨® escuchando vallenatos. Hasta Aracataca, su pueblo, tambi¨¦n llegaban los m¨²sicos cantando sus historias. El escritor colombiano dijo en una ocasi¨®n que Cien a?os de soledad era un vallenato de 300 p¨¢ginas. Lo cuenta con orgullo Carlos Vives, especialmente agradecido por el apoyo recibido por el escritor a una m¨²sica que hab¨ªa ca¨ªdo en el olvido.En su origen el vallenato no es un ritmo nacido para ser bailado, pero en la adaptaci¨®n de esa m¨²sica que hace Carlos Vives es justo lo contrario: "No importa lo que hagas, aunque sea muy el¨¦ctrico lo importante es alentar a la gente", argumenta el cantante al que ya se conoce en todo el mundo como el rey del vallenato.

El m¨²sico no es partidario de la guayabera, una prenda que siempre ha defendido su compatriota. Vives ha popularizado en sus actuaciones los mochos, "el pantal¨®n corto de andar por casa", que se han convertido en su marca registrada. De hecho, las veces que ha intentado cambiar de uniforme no ha resultado. "No se puede variar la vaina, Te pones muy fashion y se estropea el rollo", aclara el cantante. Vives tiene una peculiar forma de preparar su vestuario para las actuaciones. Guarda la ropa que envejece para presentarse ante el p¨²blico.