La poes¨ªa y el ritmo de la artista portuguesa se desgranan en 24 cuadros

La rueda de prensa para presentar la exposici¨®n de Maria Helena Vieira da Silva tuvo ayer un peque?o retraso. La culpa era del cuadro El pasadizo de los espejos, realizado en 1981, que a pesar de llegar procedente del Museo de Bellas Artes de Bilbao fue el ¨²ltimo en llegar a la sala de la BBK. Las 23 obras restantes esperaban a que este ¨®leo sobre lienzo fuera colocado en un lugar destacado: es el ¨²nico que no cuelga de la pared, sino que reposa sobre un caballete a la entrada. Los dem¨¢s cuadros de la artista portuguesa proceden de colecciones particulares y de la Galer¨ªa Jeanne-Bucher de Par¨ªs."Se trata de una retrospectiva muy seleccionada, coherente y fiel con la trayectoria de Vieira da Silva. Hace ya cuatro a?os que quer¨ªa organizar una exposici¨®n sobre esta pintora, pero no es f¨¢cil reunir tantas obras suyas", explic¨® la comisaria de la muestra Martine Soria. En su opini¨®n, la muestra aporta "una visi¨®n muy especial del arte del siglo XX".

Maria Helena Vieira da Silva perdi¨® a su padre a los dos a?os de nacer y fue educada por su madre y su t¨ªa, que despertaron en ella, a trav¨¦s del aprendizaje de la m¨²sica y el descubrimiento de las artes pl¨¢sticas, una sensibilidad art¨ªstica constante. En 1930 se cas¨® con el pintor h¨²ngaro Arpad Szenes, con quien formar¨ªa una pareja excepcional que s¨®lo trunc¨® la muerte de Szenes en 1985.

"El que Vieira da Silva sea una mujer que haya sido, adem¨¢s, educada por mujeres, no le da un toque distinto. No considero que la suya sea una pintura de mujer. Es una pintura muy fuerte y valiente", coment¨® Soria.

Figura predominante

La comisaria de la exposici¨®n recalc¨® la relevancia de esta retrospectiva de "la pintora portuguesa m¨¢s importante del siglo XX, muy relacionada con la escuela de Par¨ªs". "Aparte de la importancia de la artista en s¨ª, es una de las figuras predominantes entre los pintores de su generaci¨®n", se?al¨®. Esta es la primera vez que Bilbao acoge una muestra de Vieira da Silva. En el resto de Espa?a, "hace 15 a?os" que no se ha expuesto su trabajo. La exposici¨®n abarca un periodo de creaci¨®n que va desde 1937 a 1990. Cincuenta a?os en los que se observa c¨®mo la artista desarrolla "un lenguaje personal, un espacio laber¨ªntico vac¨ªo de presencia humana", indic¨® Soria.

"Quiero pintar lo que no existe como si existiera", dec¨ªa Maria Helena Vieira da Silva. Y en ese af¨¢n, "lo real y lo imaginario se funden en una exaltaci¨®n de ritmos", se?al¨® Soria. El trabajo de la pintora se desarrolla en series simult¨¢neas, basadas en la recurrencia de motivos (damero, taller, puente, estaciones, andamiajes), as¨ª como de las mismas problem¨¢ticas pl¨¢sticas.

La pintura creada por Vieira da Silva, que "descansa fundamentalmente sobre el rigor del dibujo y una larga reflexi¨®n gr¨¢fica", no pertenece a la figuraci¨®n narrativa. A¨²n as¨ª, en ella es posible ver la huella de su patria de origen, su presencia latente, reminiscencias de los azulejos y el fado que est¨¢n contenidas en su abstracci¨®n realista.