Puntualizaciones

A lo largo de tres extensos art¨ªculos, EL PA?S ha tratado de demostrar que el Consulado General de Espa?a en Miami dej¨® sin asistencia y protecci¨®n consulares al detenido espa?ol en la c¨¢rcel de Tampa don Joaqu¨ªn Jos¨¦ Mart¨ªnez. Mi carta del 14 de agosto y los contactos mantenidos con ese peri¨®dico desmienten suficientemente este planteamiento.El hecho de que ning¨²n funcionario del Consulado General de Espa?a visitara a don Joaqu¨ªn Jos¨¦ Mart¨ªnez durante el segundo semestre de 1996 y que el Ministerio de Asuntos Exteriores fuera informado por escrito sobre la situaci¨®n en abril de 1997, no redundaron en una situaci¨®n de indefensi¨®n o abandono del se?or Mart¨ªnez por parte del Consulado General de Espa?a en Miami, como tratar¨¦ una vez m¨¢s de aclarar.

En efecto, por lo que se refiere a las visitas, debe tenerse en cuenta la distancia f¨ªsica entre Tampa y Miami (m¨¢s de 400 kil¨®metros), la existencia de poblaci¨®n reclusa espa?ola en prisiones de o pr¨®ximas a Miami y, lo m¨¢s importante, que desde el principio se estableci¨® comunicaci¨®n escrita con el detenido, se supo en qu¨¦ situaci¨®n procesal se encontraba, las buenas perspectivas que sobre una resoluci¨®n favorable de su caso ten¨ªa su abogado defensor y que ¨¦ste era, a juicio del vicec¨®nsul honorario de Espa?a, un profesional competente. Toda esa informaci¨®n y la que posteriormente fue recabando el se?or Salcines fue puntualmente trasladada a los padres del se?or Mart¨ªnez, los cuales ve¨ªan frecuentemente a su hijo, quien no puede, por tanto, alegar que el Consulado en Miami "le dej¨® solo".

Y en cuanto a la informaci¨®n por escrito, el hecho de no haberse recibido en el Ministerio de Asuntos Exteriores hasta abril de 1997 no tuvo repercusi¨®n alguna en el procedimiento contra el se?or Mart¨ªnez, pues dicha informaci¨®n se procesa e incorpora al banco de datos de la Direcci¨®n General de Asunto Consulares y, en su caso, sirve para comunicar a los familiares del detenido la situaci¨®n en que se encuentra un familiar. El primer dato no hubiera exigido acci¨®n alguna por parte de dicha Direcci¨®n General, pues se hubiera comprobado que el se?or Mart¨ªnez estaba perfec-

tamente atendido por un competente abogado, contratado particularmente por sus padres, y que no exist¨ªan retrasos ni irregularidades en la instrucci¨®n del proceso. Y en cuanto al segundo dato, el hecho de estar los padres f¨ªsicamente en Florida en contacto constante con su hijo hubiera hecho in¨²til la gesti¨®n informativa con los familiares.

Como bien saben, el propio se?or Mart¨ªnez dio al Consulado General en Miami la primera noticia sobre su caso mediante una carta de su pu?o y letra, recibida en el Consulado el 13 de junio de 1996, en la cual ¨¦ste informaba sobre su caso, proclamaba su inocencia y ped¨ªa al Consulado que hiciera lo posible por lograr que se iniciara su juicio cuanto antes. El Consulado respondi¨® inmediatamente a dicha carta y el se?or Mart¨ªnez volvi¨® a escribir al Consulado el d¨ªa 23 del mismo mes de junio, agradeciendo expresamente la respuesta dada a su carta anterior.

Por todo cuanto antecede, considero que el Ministerio de Asuntos Exteriores ha ofrecido una explicaci¨®n exhaustiva sobre la actuaci¨®n del Consulado General de Espa?a en Miami y de su entonces titular, don Carlos Abella.- Alberto Aza Arias. Director general de la Oficina de Informaci¨®n Diplom¨¢tica. Madrid.