La americana que pudo con Fujimori
Lima anula, por presiones de Washington, la condena militar a cadena perpetua de Lori Berenson
Espectacular tiroteo
La reciente decisi¨®n de declarar nulo el juicio a una ciudadana norteamericana acusada de "traici¨®n a la patria" ha causado revuelo en Per¨². El caso Lori Berenson podr¨ªa mermar la popularidad del presidente Alberto Fujimori y ser¨¢ decisivo en las cada vez m¨¢s tensas relaciones entre Per¨² y EE UU.A¨²n permanece en la memoria de los peruanos el rostro desafiante y el mensaje destemplado de la estadounidense Lori Berenson en su presentaci¨®n a la prensa despu¨¦s de ser detenida en noviembre de 1995. "En el MRTA no hay delincuentes ni terroristas. Es un movimiento revolucionario", grit¨® frente a decenas de fot¨®grafos, camaras y periodistas locales y extranjeros.
Berenson, en su momento acusada de confeccionar un plano para que el Movimiento Revolucionario T¨²pac Amaru (MRTA) volara el Congreso de la Rep¨²blica, es uno de los cuatro extranjeros -los otros tres son chilenos y pertenecen a la misma guerrilla- condenados a cadena perpetua por la justicia militar peruana bajo el cargo de "traici¨®n a la patria", un delito que los reos siempre han rechazado, aunque sin ¨¦xito. El Congreso nunca fue dinamitado. La ¨²ltima acci¨®n del MRTA fue la toma de la Embajada de Jap¨®n durante cuatro meses en 1997 con 73 rehenes, hasta que fue recuperada por las fuerzas de seguridad.
Los acusados de terrorismo son llevados en Per¨² ante tribunales militares, donde los juicios se desarrollan sin ninguna garant¨ªa para los inculpados, conforme ha sido acreditado internacionalmente. En mayo de 1999, una sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos declar¨® nula la sentencia militar contra Berenson y los tres chilenos y orden¨® celebrar un nuevo juicio en la jurisdicci¨®n penal ordinaria.
El fiscal superior para casos de terrorismo, V¨ªctor Cubas, inform¨® ayer de que ese nuevo juicio ser¨¢ p¨²blico, abierto a la prensa y que en ¨¦l se respetar¨¢n todas las garant¨ªas procesales.
Esto fue lo que decidi¨® a Fujimori a alejarse del sistema jur¨ªdico de la Organizaci¨®n de Estados Americanos (OEA). El Gobierno peruano utiliz¨® todos los medios publicitarios a su alcance para convencer a la opini¨®n p¨²blica de que Berenson, que nunca particip¨® en una acci¨®n violenta, era un monstruo del terrorismo, y en varias ocasiones el propio presidente Fujimori dijo que "no dar¨ªa ni un paso atr¨¢s" ante las exigencias de EE UU y otras instancias de que los extranjeros acusados de terrorismo fuesen juzgados por los tribunales ordinarios.
?Qu¨¦ sucedi¨® para que despu¨¦s de cinco a?os de detenci¨®n el tribunal militar acepte que se equivoc¨®? Para la mayor¨ªa de los analistas, el Gobierno de Fujimori se vio obligado a dar una se?al de conversi¨®n a la democracia, debido a las presiones del lobby norteamericano y a una denuncia de tr¨¢fico de armas en la que cada d¨ªa el d¨²o Fujimori-Montesinos (jefe de los Servicios de Inteligencia) se enreda m¨¢s.
Desde las controvertidas elecciones presidenciales de junio, EE UU ha venido presionando al r¨¦gimen de Fujimori para que restablezca la credibilidad y legitimidad de su r¨¦gimen. Una de las demandas era la necesidad de celebrar un nuevo juicio a Lori Berenson, y lo ha conseguido. Aparentemente no hay dudas sobre su militancia en el movimiento terrorista. Su abogado es el mismo que defendi¨® al l¨ªder del MRTA, V¨ªctor Polay. Despu¨¦s de su captura, declar¨® que en esa organizaci¨®n no hay criminales. Y est¨¢ demostrado que alquil¨® una casa, que visitaba con cierta frecuencia, en la que las fuerzas de seguridad hallaron gran cantidad de armas y municiones.
Fue en 1988 cuando la neoyorquina Berenson decidi¨® dejarlo todo y vivir en Centroam¨¦rica. Anteriormente hab¨ªa realizado estudios de m¨²sica y antropolog¨ªa en el Massachussets Institute of Technology (MIT); despu¨¦s dej¨® la serena vida que sus padres -ambos profesores- le hab¨ªan dado en Nueva York.
Berenson lleg¨® a Per¨² en 1994, cuando ten¨ªa 25 a?os, acompa?ada del paname?o Pac¨ªfico Castill¨®n y despu¨¦s de haber vivido en El Salvador y Nicaragua, donde se gan¨® la vida haciendo traducciones y ense?ando ingl¨¦s, seg¨²n versi¨®n de su madre, Rhoda Berenson.
En noviembre del a?o siguiente fue detenida tras un espectacular tiroteo en el distrito lime?o de La Molina, que permiti¨® la captura de 15 miembros del MRTA, entre ellos uno de sus m¨¢s importantes y legendarios dirigentes, Miguel Rinc¨®n.En aquellos momentos en Per¨² estaba quebrado el orden institucional. En abril de 1992, Fujimori disolvi¨® el Congreso e instal¨® un Gobierno al margen de la Constituci¨®n, que promulg¨® una serie de leyes para combatir a dos movimientos sediciosos: Sendero Luminoso y el MRTA.
Se cre¨® un sistema con tribunales militares encargados de juzgar a civiles, al frente de los cuales estaban oficiales sin conocimiento de leyes, que ocultaban sus rostros con m¨¢scaras o pasamonta?as, y quienes, mediante procesos sumarios, pod¨ªan condenar a cadena perpetua por el delito de "traici¨®n a la patria" a todo aquel que resultara sospechoso de pertenecer a Sendero Luminoso o al MRTA.
Miles de peruanos -y algunos extranjeros- fueron juzgados por ese sistema y acabaron confinados en c¨¢rceles de m¨¢xima seguridad. Si bien el nuevo sistema result¨® efectivo para combatir la subversi¨®n, se cometieron una serie de errores, abusos y violaciones procesales. Fue as¨ª como Lori Berenson, pese a ser norteamericana, termin¨® condenada a cadena perpetua por "traici¨®n a la patria" en marzo de 1996.
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