"Intento que el p¨²blico salga zapateando de mi espect¨¢culo"

Mar¨ªa Carrasco (Madrid, 1972) compagina su papel de empresaria con el de bailaora casi a la fuerza. En realidad, lo que le gusta es danzar, y es m¨¢s feliz cuando sale exhausta de un ensayo de ocho horas con los miembros de su ballet que cuando se sienta en un c¨®modo sill¨®n a darle al tel¨¦fono para gestionar las pr¨®ximas galas. Jam¨¢s desconecta; no le queda otro remedio si quiere tener compa?¨ªa propia: mientras se maquilla para su espect¨¢culo Tiempos flamencos, supervisa que las luces est¨¦n bien colocadas o que el bailar¨ªn de turno lleve el chaleco adecuado. Mar¨ªa baila desde los cuatro a?os, y encontr¨® su estilo danzando entre el Real Conservatorio de Madrid, los estudios de grandes maestros y algunas escuelas for¨¢neas. Desde 1995 tiene ballet propio, y con ¨¦l ha actuado en Europa, Am¨¦rica y Asia. Hoy, jueves, recala en su ciudad con el montaje Tiempos flamencos.

Pregunta. ?Por qu¨¦ prefiere el flamenco?

Respuesta. Porque es el arte puro en la danza. Si hay que expresar sentimientos como el dolor, la pena, el amor o la pobreza, creo que el flamenco es el mejor veh¨ªculo.

P. ?Hay diferencias entre bailar en Corea y en Madrid?

R. Cuando subimos al escenario tratamos de hacerlo lo mejor posible, sea la ciudad que sea. Pero es cierto que actuar en Madrid conlleva una responsabilidad, la calidad de los bailarines tiene que ser muy buena, llevamos el doble de m¨²sicos, cuidamos de que todo sea m¨¢s novedoso. Con el p¨²blico de Madrid no puede haber trampa ni cart¨®n.

P. ?Y a usted qu¨¦ tal le trata el respetable madrile?o?

R. Yo soy conocida en el mundo del flamenco, pero, a nivel popular, a lo mejor son m¨¢s conocidos los tres bailaores que salen en la televisi¨®n, el cine o en revistas por motivos ajenos a la profesi¨®n.

P. ?Para cu¨¢ndo su salto a la gran pantalla?

R. Me han propuesto hacer una pel¨ªcula de protagonista, pero despu¨¦s de hacer la prueba he decidido que hay mucha gente con mejores dotes interpretativas. Podr¨ªa hacer un papel en el que pudiese bailar, porque lo he hecho en teatro, pero para ser protagonista hay que estar muy preparado.

P. ?Madrid no ve a los nuevos valores hasta que no los tiene encima?

R. En general, en Espa?a no se promociona el flamenco. Fuera, la gente est¨¢ sedienta de ver flamenco, es un arte de primer orden y se puede llevar a cualquier teatro del mundo.

P. ?Qu¨¦ quiere transmitir con Tiempos flamencos?

R. Busco la catarsis con el p¨²blico que buscaban los griegos. Que la gente sienta lo mismo que siento yo, que conectemos. A m¨ª me ha pasado que, al salir de bailar de mi espect¨¢culo, la gente est¨¢ en la puerta dando palmas o zapateando. Eso es lo que busco, que les llegue esa energ¨ªa.

Tiempos flamencos, en el teatro Bellas Artes (calle del Marqu¨¦s de Casa Riera, 2), del 14 al 17 de septiembre. De 2.500 a 3.500 pesetas.