150 m¨¦dicos y enfermeros luchan en Mil¨¢n para sacar adelante un embarazo de octillizos

La medicina italiana tiene entre sus manos un nuevo fen¨®meno: el embarazo de ocho gemelos de Mariella Mazzara, un ama de casa de 31 a?os de Tr¨¢pani (Sicilia). Desde el mi¨¦rcoles, cuando se produjo el nacimiento de una ni?a afectada por una grave infecci¨®n, un equipo de 150 especialistas lucha en Mil¨¢n por conservar con vida, en el vientre de la madre, a los siete restantes. Una situaci¨®n comprometida, ya que se encuentran en la 25? semana de gestaci¨®n, y los m¨¦dicos consideran imprescindible que el embarazo se prolongue al menos dos semanas m¨¢s. Si consiguen que los ocho nazcan vivos se habr¨¢n apuntado un r¨¦cord, aunque el caso ha suscitado no pocas cr¨ªticas en sectores m¨¦dicos.

Posible intervenci¨®n

En el hospital Niguarda de Mil¨¢n se ha organizado una verdadera unidad de crisis, con dos equipos (los del propio centro y el del hospital San Paolo) que suman unas 150 personas entre m¨¦dicos, expertos de obstetricia, neonat¨®logos, reanimadores y enfermeros. Todo est¨¢ preparado por si el parto se precipita. Siete incubadoras esperan a los siete beb¨¦s, ante el temor de que el embarazo deba ser interrumpido en cualquier momento.Margarita, la primera de los ocho hijos que espera la pareja formada por Mariella y Giovanni Pirrera, de 31 y 34 a?os de edad respectivamente, naci¨® el mi¨¦rcoles en el hospital Niguarda de Mil¨¢n. Pesaba 495 gramos y padec¨ªa una infecci¨®n grave. El beb¨¦ se encuentra bajo estrecha vigilancia m¨¦dica, en incubadora y con respiraci¨®n asistida porque con s¨®lo 25 semanas de gestaci¨®n sus pulmones no est¨¢n formados completamente.

A las 19.00 horas del mi¨¦rcoles todo parec¨ªa perdido, y el parto natural de los ocho gemelos un final inevitable. Sin embargo, los m¨¦dicos consiguieron detener las contracciones del ¨²tero de Mariella, y evitar as¨ª el parto prematuro de los otros siete beb¨¦s, cuya vida correr¨ªa peligro en caso de nacer.

"En consideraci¨®n a la importancia de una posterior maduraci¨®n de los siete gemelos restantes, se ha preferido que contin¨²e la gestaci¨®n, aunque reserv¨¢ndose la posibilidad de intervenir con la m¨¢xima celeridad posible, si se encontraran indicios de infecci¨®n tambi¨¦n en otros fetos", indicaba el informe del numeroso equipo m¨¦dico que se ocupa de este embarazo.En torno a este caso extraordinario de embarazo m¨²ltiple, con la atenci¨®n medi¨¢tica que le rodea, se ha desatado tambi¨¦n una campa?a cr¨ªtica de quienes consideran que los tratamientos de fertilidad deben ser manejados con m¨¢s cuidado. Las cr¨ªticas m¨¢s duras proceden de algunos especialistas que consideran que, lejos de ser un ¨¦xito de la medicina, los embarazos de este calibre son un aut¨¦ntico fracaso.

Para el profesor Carlo Flamigni, director del Instituto de Ginecolog¨ªa y Obstetricia Santa Ursula de Roma, "casos de este tipo no deber¨ªan ocurrir nunca m¨¢s". "Lo considero un error o del m¨¦dico o de la pareja, que no ha respetado la prohibici¨®n de mantener relaciones sexuales en el periodo en el que la mujer recibe estimulaci¨®n ov¨¢rica", explicaba ayer el especialista.

De la misma opini¨®n es otro m¨¦dico romano, el profesor Ettore Cittadini, para quien es "un esfuerzo in¨²til y poco razonable" el que se ven obligados a afrontar los m¨¦dicos para salvar ahora las vidas de los siete gemelos. Un coste emocional y econ¨®mico con pocas posibilidades de ¨¦xito.

La situaci¨®n de la peque?a Margarita era ayer estacionaria dentro de la precariedad. "Las primeras 48 horas son fundamentales en estos casos", explicaba Vito Console, uno de los especialistas que atienden a la madre.

Mariella y Giovanni Pirrera quer¨ªan tener hijos a toda costa y optaron por someterse a tratamientos hormonales. Al final, lograron su objetivo, pero de forma an¨®mala, con un embarazo de ocho gemelos que representa todo un reto para la medicina, con s¨®lo un caso de supervivencia de la madre y los ocho beb¨¦s, el de Nkem Chukwu y sus hijos, que se registr¨® en Tejas hace menos de dos a?os.

Cuando se supo que el embarazo era de ocho gemelos, los m¨¦dicos propusieron a la pareja optar por el aborto terap¨¦utico de algunos de los fetos, pero tanto Giovanni, funcionario de una prisi¨®n siciliana, como Mariella, ama de casa, se negaron en redondo. La primera decisi¨®n fue ponerse en manos de dos centros m¨¦dicos milaneses, los hospitales Niguarda y San Paolo, que se ofrecieron para atender este extraordinario embarazo.

La madre est¨¢ bajo control m¨¦dico en Mil¨¢n desde julio pasado, primero en el hospital San Paolo, donde los especialistas han estudiado la dieta y el tratamiento en el intento de salir victoriosos de una batalla que parece cada vez m¨¢s dif¨ªcil. Luego, a partir de agosto, la joven se traslad¨® al hospital Niguarda, mejor dotado para atender al parto y el cuidado posterior de los beb¨¦s.

Para Mariella y Giovanni, el singular embarazo ha tenido sus compensaciones. Les ha permitido, al menos, ganar varios millones de liras con la venta de la exclusiva de todo el proceso de embarazo y del posterior parto a una revista popular y afrontar con menos preocupaci¨®n el futuro cuando tengan que hacerse cargo, si todo sale bien, de una familia verdaderamente numerosa.