Dos banderilleros

Un banderillero, Vicente Yang¨¹ez, El Chano, que pare¨® formidablemente al quinto, y un encastado ejemplar de la ganader¨ªa portuguesa de Palha, de nombre Banderilheiro, protagonizaron los mejores momentos de una tarde que, en principio, se caracteriz¨® por los remiendos habidos en el cartel. Heridos el s¨¢bado en Nimes Fern¨¢ndez Meca y Antonio Ferrera, fueron sustituidos, respectivamente, por los debutantes David Gil y El Cid. Y adem¨¢s de la anunciada corrida de Palha, cuatro ejemplares fueron desechados en el reconocimiento previo, seg¨²n palabras del propio presidente del festejo, por "impresentables".Pero, de los dos supervivientes de Palha, de la criba veterinaria, Banderilheiro llev¨® la emoci¨®n a la plaza por su encastada y repetidora embestida, ante la que era muy dif¨ªcil estar. Sin embargo, no puede hablarse de un toro bravo, por cuanto fue algo distra¨ªdo, se sali¨® suelto de las series de muletazos e hizo amago de rajarse. Con ¨¦l estuvo muy valeroso y con buen corte El Cid, aunque no acabase de cuajarlo. Si no llega a ser por su desacierto a espadas, a sus manos hubiese ido a parar un bien ganado trofeo. El sexto manse¨® en los primeros tercios y en la muleta se qued¨® corto y fue a menos. El Cid le instrument¨® por bajo un torero principio de faena, pero pronto fue a menos el trasteo.

Manolo S¨¢nchez estuvo gris en su primero, pero al cuarto, aplomado en el ¨²ltimo tercio, lo mulete¨® con su reconocido buen gusto, sobresaliendo en dos series de naturales a pies juntos. Cit¨® dos veces a recibir, sin que acudiese el astado, y acab¨® con media estocada.

Ni el bien armado y serio sobrero ni el tardo quinto dieron opciones a David Gil, que estuvo esforzado y muy voluntarioso toda la tarde. Lo mejor de su actuaci¨®n, la estocada al sobrero.