El futuro es el presente

La verdadera competici¨®n comenz¨® para Espa?a con demasiadas malas noticias. Derrota, futuro complicado, rigidez ofensiva durante gran parte del encuentro, Herreros-dependencia y un rebote poco s¨®lido derivado de un hecho de imposible soluci¨®n: no tenemos un jugador que posea a la vez cent¨ªmetros, kilos y capacidad bajo el tablero.Quinteto problem¨¢tico. Lolo S¨¢inz no es amigo de cambios. Logrado un quinteto base, lo aguanta. Pero en el actual (Rodr¨ªguez, Herreros, Jim¨¦nez, Reyes y Due?as) hay cierto desequilibrio. Los problemas de los hombres altos obligan a dar muchos minutos a gente como Jim¨¦nez, buen reboteador. Pero su presencia en la posici¨®n de alero-alto deja a Herreros como ¨²nico baluarte en la anotaci¨®n, lo que tuvo muy claro la defensa rusa.

A gorrazos. Si de algo sac¨® provecho Rusia fue de la morfolog¨ªa de la mayor¨ªa de sus jugadores. No es que sean altos, sino que las caracter¨ªsticas de su f¨ªsico (delgadez y unos brazos para rascarse las plantas de los pies) fueron un obst¨¢culo insalvable para Espa?a. Cada bal¨®n lanzado cerca del aro ten¨ªa m¨¢s posibilidades de salir despedido que de encontrar su camino a la canasta.

Tchikalkine. El partido se complic¨® para los restos con la entrada de Tchikalkine. El hombre entr¨® en ¨¦xtasis e hizo un roto a la defensa espa?ola.

Cambio de rumbo. Salieron los j¨²niors y Rogers, nuestro ¨²nico hombre alto tirador, y el partido dio la vuelta como un calcet¨ªn. La actuaci¨®n de Raul L¨®pez y Navarro fue para tenerla en cuenta para un futuro. Este equipo los necesita m¨¢s que para salir cuando el marcador se?ala alarma total. En un abrir y cerrar de ojos metieron entre los dos 16 puntos. Pero eso no es lo m¨¢s importante. Aportan descaro, valent¨ªa, fantas¨ªa, velocidad y genio. Es hora de dejar a un lado su edad. Corbal¨¢n marcaba diferencias a los 17. Fernando Mart¨ªn, a los 18. Epi, a los 19. No es que el futuro pase por ellos. Estamos hablando del presente.