Fujimori proclama su apoyo a Montesinos y niega fisuras con el Ej¨¦rcito de Per¨²
El presidente peruano, Alberto Fujimori, dirigir¨¢, a su manera, la transici¨®n hasta las elecciones anticipadas. El mandatario dej¨® claro en la madrugada de ayer su firme voluntad de tutelar el cambio que se avecina en Per¨², proclam¨® su respaldo al desaparecido asesor Vladimiro Montesinos, y neg¨® cualquier fisura en su alianza con las Fuerzas Armadas. En Per¨² no pasa nada, vino a decir Fujimori, a pesar de que el propio presidente ha anunciado la convocatoria de elecciones anticipadas a los dos meses de su investidura y tras el esc¨¢ndalo de la difusi¨®n de un soborno de Montesinos.
Hasta el jueves de la semana pasada, cuando sali¨® al aire el v¨ªdeo que recoge el soborno de Montesinos a un congresista, en Per¨² hab¨ªa un poder compartido por Fujimori, su asesor y los militares. Tras el inesperado anuncio de comicios anticipados, muchos vislumbraron el principio del fin de la entente y una luz para un cambio real en la estructura de poder. Pero ayer Fujimori desalent¨® estas expectativas. Sonriente y aparentemente relajado, hizo su primera aparici¨®n p¨²blica desde el breve mensaje televisado a la naci¨®n el s¨¢bado pasado, en el que anunci¨® nuevas elecciones y la desactivaci¨®n del todopoderoso Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), al mando del controvertido Montesinos. Desde entonces, el paradero del asesor es un misterio para los peruanos, que se hallan sumergidos en un mar de rumores. Fujimori y los tres ministros que le acompa?aban en la conferencia de prensa de ayer no dieron pistas sobre d¨®nde se oculta, pero aclararon que Montesinos est¨¢ bien protegido y que aunque tuvieran conocimiento de d¨®nde se encuentra, como probablemente tienen, no lo revelar¨ªan "por razones de seguridad". Montesinos est¨¢ en Lima "con toda la seguridad que le corresponde. Un poquito mayor que la que tiene un ministro", puntualiz¨® el presidente, porque podr¨ªa ser blanco de un atentado de Sendero Luminoso o del MRTA, las dos organizaciones que protagonizaron los peores a?os de violencia terrorista que ha vivido Per¨².
"Hay que ponerle seguridad a este hombre que ha cometido errores, como todo ser humano, pero que ha contribuido a la seguridad del pa¨ªs". Con estas palabras, Fujimori demostraba que la pregunta que corresponde hacerse ya no es d¨®nde est¨¢ Montesinos, sino si est¨¢ realmente fuera del poder. El diario Expreso, pr¨®ximo al Gobierno, aseguraba en su edici¨®n de ayer que el jefe de SIN est¨¢ en el Cuartel General del Ej¨¦rcito, donde entra y sale sin problemas y con protecci¨®n militar. ?Le ha retirado el respaldo moral a Montesinos?, le preguntaron. "No podemos adelantar acontecimientos", contest¨® el presidente. Uno de sus ministros agreg¨® que el Gobierno cree que el superesp¨ªa peruano tiene que ser sometido a un juicio justo y con todas las garant¨ªas.
Rodeado del jefe de Gabinete, Federico Salas, y los ministros de Justicia, Alberto Bustamante, y de Trabajo, Edgardo Mosqueira, Fujimori detall¨® algunos de los pasos que se dispone a dar para la convocatoria de elecciones anticipadas el a?o pr¨®ximo. La primera modificaci¨®n constitucional afecta a la reducci¨®n provisional a un a?o del mandato de congresistas y del Gobierno, hasta el 28 de julio de 2001, fecha prevista para la nueva investidura. Hasta entonces, ?qui¨¦n gobernar¨¢ en Per¨²? "El Ejecutivo y el presidente", afirm¨® contundente Fujimori. "No hay vac¨ªo de poder y seguiremos trabajando hasta el ¨²ltimo d¨ªa". Paradojas de los nuevos aires que pretende insuflar Fujimori son otras dos reformas constitucionales que tiene sobre la mesa: la que impedir¨¢ la reelecci¨®n (cuando el mismo Fujimori viol¨® la Carta Magna para forzar su tercera reelecci¨®n), y la que permitir¨¢ la elecci¨®n de presidente sin lograr la mayor¨ªa absoluta en primera vuelta, siempre y cuando aventaje en 10 puntos al siguiente candidato m¨¢s votado. Una lectura de esta ¨²ltima disposici¨®n permite comprobar que el fujimorismo, que sin duda presentar¨¢ un candidato ¨²nico, puede ser el m¨¢s favorecido frente a la oposici¨®n que encara dividida unos comicios inesperados. Fujimori envi¨® ayer al Congreso el proyecto de reforma constitucional con el objetivo de adelantar las elecciones.
"Yo no he dimitido, estoy en plenas funciones", reiter¨® Fujimori al tiempo que anunci¨® que se dispone a recorrer de nuevo todo el pa¨ªs, como si estuviera a punto de iniciar otra carrera electoral. No hay duda, Fujimori no tira la toalla y su discurso es el de siempre. Antes de la conferencia de prensa, algunos miles de manifestantes trasladados en autobuses desde la periferia de Lima se concentraron en la plaza de Armas frente al Palacio de Gobierno para rendir tributo a su l¨ªder. "Fujimori, las madres te apoyan", se le¨ªa en una pancarta. Empezaron a llegar a las cuatro de la tarde. Tres horas m¨¢s tarde, Fujimori sali¨® a saludar y, junto a su hija Keiko Sof¨ªa, se encaram¨® a la verja de palacio para saludar a sus seguidores.
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