Borrachera y cobard¨ªa

El primer ministro espa?ol, don Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, en unas declaraciones a tres periodistas cortesanos del diario El Mundo (8-10-00), dec¨ªa que los "los actuales dirigentes del PNV no se pueden ir de rositas" por su "deslealtad hist¨®rica". Y afirmaba que esa deslealtad "no puede quedar sin ser sancionada por los ciudadanos". Sin embargo, y por si acaso, don Jos¨¦ Mar¨ªa ya ha emprendido acciones por su cuenta. No sea que los ciudadanos no sancionen al PNV como fuera de desear. Y as¨ª tenemos que en la pasada reuni¨®n de la Internacional Dem¨®crata Cristiana (IDC) celebrada en Chile, nuestro saleroso presidente del Gobierno espa?ol consigui¨® convencer a todos los presentes, a trav¨¦s de su mandatario se?or Arenas y acompa?antes, que el PNV, fundador de la IDC, fuese expulsado de la citada Internacional. Con los votos en contra de Uni¨® Democr¨¢tica de Catalunya (UDC), que forma parte, tambi¨¦n, como el PNV, de la Internacional dem¨®crata cristiana. Noble actitud que le cost¨® no acceder a una de las vicepresidencias que iba a ocupar Concepci¨® Ferrer. El l¨ªder de UDC, Duran i Lleida, acus¨® al se?or Aznar y a los dirigentes del PP de estar inmersos en una "borrachera de poder". Yo a?adir¨ªa que hicieron gala de su cobard¨ªa.El empe?o de castigar al PNV por parte de estos "dem¨®cratas de pacotilla" no ten¨ªa otro motivo que acusar al partido vasco de "connivencia" con los terroristas. Incapaces de acabar con el terrorismo de ETA -la ineficacia del ministro Mayor Oreja es denunciada, incluso, por los medios adictos al r¨¦gimen aznarista- Aznar y sus secuaces han encontrado en la descalificaci¨®n y satanizaci¨®n del PNV una salida para entretener al personal y enmascarar, as¨ª, su fracaso en la lucha antiterrorista. El PNV es m¨¢s o menos como ETA. Este es el mensaje que est¨¢n lanzando al vecindario para que identifique el PNV con los terroristas. En coherencia con ello, tendr¨ªan que haber denunciado en estos extremos y con estas acusaciones al PNV ante la Internacional Dem¨®crata Cristiana y pedir, por ello, su expulsi¨®n, por ser un partido pol¨ªtico que "convive y respalda a los terroristas". Pero no se atrevieron. Se acobardaron. Entonces se busc¨® una f¨®rmula, previa modificaci¨®n de los estatutos de la IDC, seg¨²n la cual el PNV era expulsado de la organizaci¨®n por no formar parte del grupo continental europeo de la IDC, por haber decidido el PNV -en mi opini¨®n con mucho acierto- salirse de la misma. Para formar parte de la Internacional Dem¨®crata Cristiana, seg¨²n los nuevos estatutos, hay que estar integrado en las organizaciones continentales, es decir, regionales.

Pero no era ¨¦ste el motivo. El PP hubiese querido que la expulsi¨®n fuese bien expl¨ªcita: por ser el PNV un partido que estaba a favor del "terrorismo". No lo consigui¨®. Se busc¨® la f¨®rmula de modificar los estatutos en el sentido antes dicho. Pero para consumo interno, para consumo de la opini¨®n p¨²blica espa?ola, se ten¨ªa que decir que el PNV hab¨ªa sido expulsado por "terrorista". El se?or Arenas, sin ir m¨¢s lejos, en una entevista desde Chile con los tertulianos de RNE -todos adictos a la causa aznarista- se encargaba de transmitir a la audiencia el "verdadero" motivo de la expulsi¨®n del PNV: su connivencia con el terrorismo. Resultaba jocoso como el pol¨ªt¨ªco Arenas y los tertulianos adictos se retroalimentaban d¨¢ndole ca?a al PNV. Esa no era la causa "oficial" de la expulsi¨®n. Pero pagados por todos los contribuyentes -el pol¨ªtico Arenas y los tertullianos de RNE- se dedicaban a intoxicar al vecindario. ?Son unos dem¨®cratas, qu¨¦ carajo!

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