Tah¨²res burdos

El esp¨ªritu preol¨ªmpico que animaba a la concordia entre el gobierno municipal y la oposici¨®n se ha resquebrajado con doce a?os de antelaci¨®n sobre la fecha prevista. Socialistas e izquierdistas unitarios han roto la baraja al enterarse, por los peri¨®dicos al parecer, de que la honrosa calificaci¨®n de ciudad ol¨ªmpica pasa por la no menos ol¨ªmpica recalificaci¨®n de la Ciudad Deportiva del Real Madrid, en cuyos terrenos, que hoy no valen un euro, la empresa blanca tiene previsto construir cuatro torres de treinta pisos. Otro que tambi¨¦n se enter¨® por los peri¨®dicos o por la televisi¨®n de c¨®mo estaban las cosas fue el alcalde de Madrid, que, fiel a la m¨¢xima evang¨¦lica "que tu mano derecha no sepa lo que hace tu mano izquierda", reconoci¨® no saber nada sobre la espont¨¢nea excursi¨®n de su segundo teniente de alcalde y responsable de urbanismo, Ignacio del R¨ªo, que se fue a Barcelona para presentar, por su cuenta y por sorpresa, la presunta maqueta del presunto pabell¨®n ol¨ªmpico, enmarcado entre los presuntos rascacielos de Florentino y el presunto dise?o del logotipo preol¨ªmpico.La elecci¨®n de Barcelona, en v¨ªsperas del Figo-derby, Bar?a-Real, no se sabe si fue una provocaci¨®n madridista m¨¢s o un tributo a la ciudad capital del dise?o y de la vanguardia. O tal vez s¨®lo fue una maniobra de despiste de don Ignacio para que ni la oposici¨®n ni el alcalde pudieran aguarle la fiesta. El alcalde no tuvo reparos en desautorizar a su intr¨¦pido concejal minimizando el alcance de su iniciativa. Se trata, explic¨® en presencia de su impaciente subordinado, de una maqueta indefinida que forma parte de un proyecto no terminado. Vaguedad de vaguedades en una nebulosa candidatura que hoy, con la ruptura del consenso por parte de la oposici¨®n, est¨¢ m¨¢s en el aire que nunca. Con sus prisas, Ignacio del R¨ªo ha destapado prematuramente la caja de los truenos y ha puesto a su jefe en el brete de tener que salirse una vez m¨¢s por la tangente con su cl¨¢sico estilo divagatorio, indeterminado e indefinido, como la maqueta.

Al alcalde de Madrid, cuenta EL PA?S, no le gustan los rascacielos y el concejal Del R¨ªo le ha puesto cuatro pegados a la Castellana, una zona de expansi¨®n inmobiliaria, punto crucial del monopoly madrile?o actualizado en la que tambi¨¦n intenta colocar casas y hoteles su compa?ero de juego y de partido, pero rival sobre el tablero, Alberto Ruiz-Gallard¨®n.

Juego de tah¨²res, o de trileros, como dijo la portavoz de Izquierda Unida, In¨¦s Saban¨¦s, una partida en la que todos guardan ases en la manga que hay que saber jugar a tiempo, sin precipitarse. Ignacio del R¨ªo, con su indiscreto farol, ha desvelado la jugada y ha puesto demasiadas cartas sobre la mesa, y ahora le toca a ?lvarez del Manzano enfriar el juego y cambiar de estrategia.

Lo de menos es que al alcalde no le gusten los rascacielos, pues en la pr¨®xima maqueta, en lugar de cuatro torres de treinta plantas se ponen ocho de quince o diez de doce, y en paz, pues a¨²n quedar¨¢ sitio para ese pabell¨®n circense, el Pabell¨®n Arena, que a cambio de la colosal recalificaci¨®n el club blanco ceder¨ªa al Ayuntamiento.

Las decisiones importantes sobre el futuro de Madrid no se toman en los plenos, como sospecha la portavoz socialista, Matilde Fern¨¢ndez, las decisiones importantes se toman, como tambi¨¦n sospecha la aludida, ante un grupo de empresarios, sin consenso y primando los intereses particulares de unos pocos frente al inter¨¦s general.

Que triunfe o no triunfe la candidatura madrile?a, es un asunto secundario, casi irrelevante; lo que cuenta es iniciar cuanto antes la recalificaci¨®n y la construcci¨®n del citado pabell¨®n ol¨ªmpico, que se presenta como una baza importante para que el COI se decante a favor de Madrid como sede de los Juegos.

Si triunfa la candidatura, todos contentos, y si no triunfa, tambi¨¦n, porque Madrid habr¨¢ ganado un coliseo con 18.000 localidades, y el Real, unas plusval¨ªas enormes que permitir¨¢n al club realizar fichajes astron¨®micos y dominar en todas las ligas y copas nacionales, intercontinentales e internacionales del deporte rey. Si sobra algo incluso podr¨ªan echarle una mano al Atleti de Gil, que anda muy necesitado.