El conductor del coche oficial del magistrado Querol llevaba tres a?os al servicio del Tribunal Supremo

Armando Medina S¨¢nchez, de 57 a?os, el conductor del veh¨ªculo oficial del magistrado Jos¨¦ Francisco Querol, estaba al servicio de la Sala Quinta de lo Militar del Tribunal Supremo desde 1997, aunque trabajaba en el Parque M¨®vil del Estado desde 1979. Medina, casado y con un hijo de 30 a?os, guardia civil de profesi¨®n, hab¨ªa trabado cierta amistad con su jefe y tambi¨¦n hab¨ªa adoptado algunas rutinas en la zona del triple crimen.Pr¨¢cticamente todas las ma?anas desayunaba en el bar Valencita, sito en la avenida de Badajoz, donde sol¨ªa tomar un caf¨¦ con leche y porras. All¨ª charlaba con los camareros, especialmente con Pedro, y con un empleado turco, que dijo llamarse Jos¨¦. "?ltimamente me preguntaba por mi padre, que hab¨ªa sufrido un infarto de miocardio. Era un hombre muy simp¨¢tico y muy atento y ya no le volveremos a ver", comentaba el camarero del bar.

Medina S¨¢nchez, afiliado al sindicato UGT desde 1985, hab¨ªa nacido en 1943 en Melilla y antes de entrar en el parque m¨®vil hab¨ªa trabajado para una empresa privada. En 1992 hab¨ªa comenzado a prestar servicios en el Tribunal Supremo, en el que hab¨ªa sido el conductor de varios magistrados. Fue en 1997 cuando qued¨® adscrito a la Sala Quinta y hace s¨®lo dos a?os que era el conductor fijo de Querol Lombardero.

S¨®lo dos rutas posibles

El veh¨ªculo oficial, un Renault Megane de color verde, matr¨ªcula PMM-1443-A, carec¨ªa de blindaje y tampoco dispon¨ªa de un inhibidor de frecuencias, un sistema radioel¨¦ctrico que corta las se?ales de mandos a distancia, interrumpe se?ales de radio e incluso corta las comunicaciones por tel¨¦fono m¨®viles. El coche afectado, que qued¨® irreconocible, no era el habitual en su trabajo, seg¨²n el portero de la finca del magistrado. "El Megane era la primera vez que lo tra¨ªa", declar¨® el conserje Fernando Sanz. ?ste explic¨® que magistrado, conductor y escolta s¨®lo ten¨ªa dos alternativas en su recorrido hacia el Tribunal Supremo: bajando la calle de Torrelaguna hacia la avenida de Badajoz, por el carril reservado a autobuses de l¨ªnea o taxis, o hacia arriba de Torrelaguna, hacia la calle Condesa de Venadito o hacia la M-30.

La capilla ardiente con los restos mortales del magistrado y de su conductor qued¨® instalada ayer en el Sal¨®n de Plenos del Tribunal Supremo. Ambos ser¨¢n enterrados hoy en el cementerio de la Almudena, tras el funeral en el sal¨®n de Pasos Perdidos en el alto tribunal.