Espa?a destina siete veces menos recursos en ayudas a la familia que la media europea

Espa?a destina siete veces menos recursos a subsidios o ayudas a las familias que la media de los pa¨ªses europeos y se sit¨²a en el grupo de los que menos gastan en este tipo de ayudas, junto a Italia, Grecia y Portugal, seg¨²n un estudio publicado por la Fundaci¨®n La Caixa y presentado ayer en Barcelona. El informe concluye que en Espa?a no existe una pol¨ªtica global de ayuda a las familias y que ciertas reformas recientes en el IRPF han acentuado las diferencias sociales, ya que las familias de clase media y alta obtienen un trato m¨¢s favorable que las de rentas m¨¢s modestas.

Menor tasa de natalidad

El informe ha sido realizado por el profesor de Sociolog¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona (UAB) Llu¨ªs Flaquer, quien se?ala que en Espa?a la protecci¨®n econ¨®mica a la familia adopta dos modalidades, el subsidio familiar directo, que se destina a las familias con menos recursos, y las desgravaciones fiscales, que benefician especialmente a las capas m¨¢s acomodadas. Flaquer destac¨® ayer que los subsidios directos son en Espa?a siete veces inferiores a la media europea. En cambio, las recientes reformas introducidas en el impuesto de la renta permiten que las familias m¨¢s acomodadas puedan recibir mayores ayudas.Hasta ahora, el criterio dominante en Europa era que las ayudas a las familias fueran de car¨¢cter universal, es decir, una cantidad igual por hijo, independientemente de la renta. En Espa?a s¨®lo reciben subsidios por hijos las familias con menos recursos. "En estos casos, las familias cuentan con una ayuda que no llega a las 50.000 pesetas por hijo al a?o, mientras que en Europa cobran la totalidad de las familias, independientemente de la renta, y el importe es mucho m¨¢s elevado", apunt¨® el soci¨®logo. Y como ejemplos cit¨® a Alemania, donde una familia con cuatro hijos cobra 100.000 pesetas al mes, y Suecia, donde una familia con un hijo cobra 140.000 pesetas tambi¨¦n mensuales. Para Flaquer, "la pol¨ªtica familiar se debe computar m¨¢s como una inversi¨®n que como un gasto", a?adi¨®.

El informe sostiene que en Espa?a, las familias no s¨®lo reciben menos subsidios directos, sino que las recientes reformas del IRPF "se contradicen con el esp¨ªritu de la reforma de 1990 de favorecer a las familias m¨¢s pobres dedic¨¢ndoles mayores recursos". Mientras las familias que ganan menos de 1,5 millones y que no est¨¢n obligadas a presentar la declaraci¨®n reciben un subsidio de 50.000 pesetas al a?o por cada hijo, las que tienen rentas superiores pueden desgravar de la base imponible hasta 200.000 pesetas por el primer y segundo hijos, y 300.000 por el tercero, adem¨¢s de otras deducciones.

Seg¨²n explic¨® Flaquer, Espa?a mantiene "un sistema tradicional, ya que al no haber ayudas a la familia, las mujeres se han incorporado al mercado laboral, pero siguen siendo a su cargo las personas dependientes (hijos y ancianos)". Esto provoca que las mujeres espa?olas trabajen m¨¢s horas y por ello est¨¦n "m¨¢s estresadas" que el resto de europeas.

El informe subraya la carencia de mecanismos que favorezcan la conciliaci¨®n de la vida familiar y la laboral.

Flaquer considera que el apoyo a los cabezas de familia contrasta con las insuficiencias de las ayudas dirigidas a los j¨®venes y a las mujeres. Muchas mujeres, por ejemplo, trabajan en la econom¨ªa sumergida y no pueden disfrutar de permisos de maternidad (s¨®lo un tercio de las espa?olas puede acceder a esta prestaci¨®n). Tampoco se ha desarrollado en Espa?a el trabajo a tiempo parcial con contrato estable (s¨®lo lo tiene el 17% de las mujeres ocupadas, cuando en Holanda, por ejemplo, alcanza el 68%), ni un sistema p¨²blico de guarder¨ªas para ni?os de 0-3 a?os, con lo cual las madres que trabajan carecen de otra alternativa que las guarder¨ªas privadas.

La falta de una pol¨ªtica global y el raquitismo de las ayudas a las familias hacen de Espa?a el pa¨ªs del mundo con menor tasa de fecundidad, con 1,07 hijos por mujer. El informe propone mejorar los servicios p¨²blicos para personas dependientes y una reforma en profundidad de los sistemas de protecci¨®n econ¨®mica a la familia. "La mejor forma de que nazcan hijos es crear condiciones de bienestar en las familias para que los puedan acoger convenientemente. Hasta entonces no va a aumentar la natalidad en nuestro pa¨ªs", afirm¨® Flaquer. En cuanto a los j¨®venes, el estudio se?ala que el fomento de la compra en detrimento del alquiler es uno de los motivos que retrasan la salida de los hijos del hogar de los padres y el descenso de la natalidad. Por ello, el informe defiende la necesidad de promover viviendas de alquiler para j¨®venes y la concesi¨®n de subvenciones a los j¨®venes que no han conseguido el primer empleo.