La amenaza est¨¢ en el aire
Al cartero jubilado ?ngel Garc¨ªa le "dol¨ªa toda la persona" a finales de septiembre. Ingres¨® el 1 de octubre en el hospital Virgen de los Lirios de Alcoy aquejado de neumon¨ªa. La semana anterior hab¨ªa empezado a sentirse mal, y al final pasaba m¨¢s noches en el sof¨¢ que en la cama, porque no pod¨ªa respirar, ten¨ªa fiebre y el dolor se le generalizaba. "Mi persona iba a menos", relata. El m¨¦dico de cabecera le prescribi¨® unos antibi¨®ticos, pero no sirvi¨® de nada y tuvo que ingresar, puesto que desde 1986 lleva un marcapasos, es diab¨¦tico y su vida corr¨ªa peligro.?ngel ocup¨® la misma cama del pasillo que hab¨ªa dejado tras el alta otro infectado de legionella de la calle Oliver, aunque ¨¦l todav¨ªa no sab¨ªa qu¨¦ ten¨ªa. Tras los an¨¢lisis y radiograf¨ªas correspondientes se lo comunicaron. Y a la semana de estar ingresado supo que el hospital estaba lleno de pacientes con su mismo cuadro cl¨ªnico. "Hab¨ªa m¨¢s de 90 personas que estaban pasando por mi misma situaci¨®n", explica, pero lo supo por las visitas y por vecinos de habitaci¨®n. Oficialmente s¨®lo le dijeron que "ya estaba todo controlado y cortado". Hoy la autoridad competente reconoce hasta 117 casos y dos muertes en s¨®lo un a?o.
Este jubilado de 61 a?os vive en la calle de la Pur¨ªsima, en el casco antiguo junto al r¨ªo Barxell, en cuyo cauce se encuentran varias industrias con torres de refrigeraci¨®n en los tejados, que sin el mantenimiento apropiado constituyen un h¨¢bitat id¨®neo para este microorganismo. Cada d¨ªa, ?ngel daba un paseo por la t¨ªpica "volta als ponts", en cuyo recorrido se encuentran varias de estas empresas como Marcial, la Estambrera y Montllor. "A menudo me han venido unos olores como de ¨¢cidos, y me he quedado sin poder respirar", describe. A ?ngel le falta un fundamento para poder ejercer el derecho a la queja. No sabe de d¨®nde procede esta bacteria. "No hay informaci¨®n. Y si se sabe algo, no se dice. Procuran esconderla para evitar reclamaciones y que la gente pida indemnizaciones", se duele, con su silueta recortada sobre una pared en la que cuelgan un sable y un trabuco de la fil¨¤ Els Munta?esos, a la que pertenece.
Pepe P¨¦rez hace un mes que ha vuelto a su trabajo en su librer¨ªa y papeler¨ªa de la calle Els Al?amora, en la ribera del Barxell del ensanche. En septiembre ingres¨® en el hospital con s¨ªntomas de resfriado, que por ser diab¨¦tico y llevar un estricto r¨¦gimen de 1.100 calor¨ªas, le afectaba de manera grave. Hab¨ªa estado devolviendo todo lo que com¨ªa y se encontraba tan d¨¦bil que entr¨® por urgencias. No tardaron en diagnosticarle legionella, y enseguida supo que en el hospital hab¨ªa ingresados hasta seis vecinos de su calle. "No s¨¦ si la bacteria est¨¢ en esta misma calle o d¨®nde, porque yo por las ma?anas reparto prensa y me muevo hasta la Alameda", afirma. Le dijeron que pod¨ªa ser de las torres de refrigeraci¨®n, pero ¨¦l no sabe a qu¨¦ atenerse. Ahora, tras nueve d¨ªas sin poderse mover en el hospital, en los que perdi¨® 12 kilos, ha superado la enfermedad. "Ahora estoy una gracia", se diagnostica.
Pero en el interior de este quiosquero de 51 a?os se mueve una placa de inquietud. Un conocido suyo, que vive en una mas¨ªa por Beniarr¨¦s, se desplaz¨® un d¨ªa a Alcoy para almorzar y se contagi¨®. La incertidumbre planea sobre una comarca, donde la memoria mantiene vigentes las consecuencias del envenenamiento por aerograf¨ªa en la empresa Ardystil. Sin embargo, el presidente de la Asociaci¨®n de Hosteler¨ªa del Centro La Bandeja, Jordi Ll¨¢cer, no ha detectado hasta ahora preocupaci¨®n en un sector en apariencia vulnerable ante una alarma social que puede alejar de Alcoy a los visitantes potenciales. Pese a que procura estar al corriente de las noticias que se publican sobre el brote, reconoce que "el tema se lleva muy de tapadillo". "En Vigo lo han cogido m¨¢s en serio y parece que lo han cortado. En Alcoy llevamos un a?o dando tumbos y no adelantamos nada", manifiesta.
Hasta ahora se han localizado 19 torres de refrigeraci¨®n en las que se alojaba esta bacteria. Siete de ellas han sido desinfectadas, ocho se encuentran fuera de uso y el resto han sido precintadas. Dentro de las empresas no se ha detectado nada. El presidente de la Asociaci¨®n Empresarial Textil Alcoyana, Richard Waring, asegura que la legionella "no es un riesgo para los empresarios", aunque reconoce el desconocimiento generalizado por parte de los industriales para afrontar su erradicaci¨®n. Waring tampoco esconde que la entidad que preside desconoce de manera oficial el protocolo del Ayuntamiento de Alcoy y la Consejer¨ªa de Medio Ambiente para sanear las instalaciones infectadas.
El pasado junio, tras casi un a?o de manifestarse el brote, se firm¨® un protocolo para el control de la legionella. Pero las medidas preventivas de este documento basado en el Estudio epidemiol¨®gico de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares y en el ¨²nico referente legislativo al respecto, el de la Comunidad de Madrid, se ha demostrado poco efectivo. S¨®lo se trataba de un protocolo de vinculaci¨®n, no de obligado cumplimiento. Pese a que ha habido empresas "con una actitud ejemplar", seg¨²n Paco Molina, secretario general de CC OO en las comarcas centrales, "muchas otras ni han contestado". "El protocolo ha sido vulnerado, y no s¨®lo lo sabe CC OO", explica.
Ni el Ayuntamiento de Alcoy, ni el de Cocentaina, saben las instalaciones que existen en las empresas que est¨¢n ubicadas en sus t¨¦rminos. Una de las intenciones de este protocolo, a partir de la encuesta remitida a las empresas, era la de establecer un censo de torres de refrigeraci¨®n y de otros aparatos susceptibles de constituir un foco de infecci¨®n. Pero muchas empresas no se hab¨ªan ni molestado en contestar hace unas semanas.
El jueves pasado, tras 14 meses de haberse manifestado el brote, el alcalde de Alcoy, Miguel Peralta, precipit¨® una comparecencia junto al director general de Salud P¨²blica, Francisco Bueno, la directora general de Calidad Ambiental y el director del hospital Virgen de los Lirios para tranquilizar a la poblaci¨®n con el anuncio de una nueva normativa que revocar¨¢ la licencia de actividades a las empresas que no cumplan el protocolo. En esa l¨ªnea, ayer mismo el alcalde anunci¨® que Sanidad ha ordenado "el cierre de las torres de refrigeraci¨®n para realizar un tratamiento higi¨¦nico-sanitario, sobre todo en aquellas cuyo suministro de agua se realiza desde pozos privados ajenos a la red p¨²blica".
"Por las experiencias que tenemos en la zona en esta materia", previene Molina, "empezamos a temblar cuando aparecen diversas administraciones diciendo tranquilos, aqu¨ª no pasa nada". Molina se muestra convencido de que la realidad ha ido muy por delante de la din¨¢mica de la legislaci¨®n. El sindicato reprocha que en el transcurso de un a?o las diferentes administraciones y los partidos "se hayan limitado a situarse responsabilidades" y no hayan adoptado medidas de car¨¢cter legislativo. Asimismo cree que ya no es momento de "regular el tipo de actividades o aparatos", "sino de poner medios de tutela y control para que las instalaciones est¨¦n registradas y los mantenimientos y las emisiones se produzcan en condiciones de seguridad para la salud p¨²blica".
Catorce meses despu¨¦s, la amenaza todav¨ªa est¨¢ en el aire.
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