Los gases t¨®xicos acumulados en el t¨²nel de Kaprun dificultan el rescate de las v¨ªctimas
La operaci¨®n para sacar del t¨²nel de alta monta?a los cad¨¢veres de las al menos 155 personas que murieron asfixiadas y quemadas en el funicular incendiado el pasado s¨¢bado en la subida al glaciar de Kitzsteinhorn (suroeste de Salzburgo) se vio ayer de nuevo retrasada por los gases t¨®xicos, pese a que los equipos de rescate lograron empezar a trabajar en su interior. El n¨²mero de v¨ªctimas sigue siendo incierto, pero podr¨ªa elevarse a 175. Se sabe que no hay ning¨²n espa?ol entre las v¨ªctimas y se confirm¨® que s¨®lo 12 personas lograron salvarse rompiendo una ventanilla del vag¨®n incendiado.
Los equipos de rescate austriacos penetraron ayer el primer vag¨®n del funicular incendiado y examinaban los cuerpos de las v¨ªctimas del incendio, seg¨²n informaron fuentes policiales. Las causas del accidente se desconocen todav¨ªa y el esclarecimiento puede tardar "d¨ªas, semanas o meses", seg¨²n dijo el comandante de la Cruz Roja Gerhard Huber. El rescate de los cuerpos logr¨® iniciarse a ¨²ltima hora de la tarde de ayer y se decidi¨® continuar sin interrupci¨®n, pero con menos intensidad, durante toda la noche. Sin embargo, la densidad de los humos t¨®xicos y los materiales en brasas hicieron que se interrumpieran los trabajos repetidas veces, y las autoridades aseguraron que hasta hoy no ser¨¢ posible el transporte de cad¨¢veres.
Soldados del Ej¨¦rcito austriaco recibieron el arriesgado encargo de rescatar los cuerpos. Tuvieron que entrar por la boca superior del t¨²nel, que parec¨ªa todav¨ªa una chimenea humeante, en pendiente muy vertical. Un importante tramo de las escaleras a lo largo de la galer¨ªa qued¨® totalmente destruido y hubo que instalar otros soportes provisionales para poder descender, seg¨²n explic¨® Huber. Por la entrada inferior del t¨²nel se intentaba reforzar el sost¨¦n del tren, para prevenir que se desplome monta?a abajo. "No queremos arriesgar m¨¢s vidas", dijo el jefe del Gobierno regional de Salzburgo, Franz Schausberger. Los equipos de soldados y otros socorristas est¨¢n respaldados por psic¨®logos y se sustituyen continuamente para poder afrontar la horrorosa situaci¨®n. Tienen que sacar los cad¨¢veres a pulso porque no hay posibilidad de utilizar ninguna maquinaria.
Desde la cima de la monta?a, los restos ser¨¢n transportados a partir de hoy en helic¨®pteros a la cl¨ªnica forense de Salzburgo. Catorce de los 18 heridos (los 12 supervivientes y otras personas que estaban en la salida superior del t¨²nel) ingresados en la cl¨ªnica de Zell am See fueron dados de alta "porque ten¨ªan heridas de levedad y quer¨ªan alejarse lo antes posible del acoso de la prensa", seg¨²n inform¨® el director del hospital. S¨®lo uno de los pacientes que inhal¨® gases t¨®xicos se encuentra herido de gravedad, pero en situaci¨®n estable.
Seg¨²n cont¨® uno de los supervivientes, si 12 personas lograron salir con vida de ese infierno fue gracias a un hombre robusto, de 36 a?os, que rompi¨® con un bast¨®n de esqu¨ª una ventanilla e inst¨® a los dem¨¢s a seguirle pendiente abajo, pasando junto al vag¨®n en llamas. Los que le hicieron caso se salvaron, pero los que corrieron hacia arriba no tuvieron posibilidad de sobrevivir. Dos de las v¨ªctimas eran campeones de esqu¨ª; un austriaco y la alemana Sandra Schmitt, que compet¨ªa en estilo libre.
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