Una biograf¨ªa rescata del olvido la figura de Fernando de los R¨ªos
Virgilio Zapatero publica una obra sobre el pol¨ªtico republicano
Intelectual antes que pol¨ªtico, Fernando de los R¨ªos (Ronda, 1879-Nueva York, 1949) fue una de las figuras clave de la II Rep¨²blica Espa?ola. Ministro en varios Gobiernos, embajador y dirigente del PSOE, su aportaci¨®n p¨²blica fue decisiva en aquellos a?os. Pero su vida y su obra apenas son conocidas, y la biograf¨ªa que acaba de publicar Virgilio Zapatero se convierte en la primera obra de referencia sobre Fernando de los R¨ªos.
Como ha ocurrido con tantos otros personajes de primera fila de la etapa republicana, la guerra civil y el franquismo borraron despu¨¦s sus huellas. "Esa ruptura dram¨¢tica impidi¨® a Fernando de los R¨ªos una relaci¨®n acad¨¦mica con sus disc¨ªpulos o pol¨ªtica con sus seguidores", comenta Virgilio Zapatero, catedr¨¢tico de Filosof¨ªa del Derecho y que ocup¨® altos cargos en la Administraci¨®n socialista durante los a?os ochenta. Estudioso desde hace 30 a?os de la trayectoria de Fernando de los R¨ªos, dud¨® Zapatero en escribir una biograf¨ªa del pol¨ªtico republicano, pero al final comprendi¨® que ten¨ªa una deuda contra¨ªda.Fernando de los R¨ªos, biograf¨ªa intelectual (Pre-Textos) repasa la vida de un pol¨ªtico y catedr¨¢tico que atraviesa distintas ¨¦pocas, desde la Restauraci¨®n hasta la guerra fr¨ªa pasando por el desastre del 98, la Rep¨²blica, la guerra civil, los dos conflictos mundiales y la guerra fr¨ªa. "De los R¨ªos", se?ala Zapatero, "es un intelectual que se ve arrastrado a la pol¨ªtica, que intenta dejar varias veces las tareas p¨²blicas, pero que siempre se ve impulsado por un rigorismo moral a participar en la acci¨®n".
Un episodio ilustra a la perfecci¨®n la actitud que mantuvo De los R¨ªos. Nombrado ministro en el primer Gobierno republicano de abril de 1931, tom¨® posesi¨®n del antiguo departamento de Gracia y Justicia con las siguientes palabras: "Vengo no para hacer Gracia, que queda eliminada de nuestro escudo, sino para hacer justicia, pues creemos que hasta ahora no se ha hecho". Este socialista ilustrado, influido por la Instituci¨®n Libre de Ense?anza y que trat¨® a personalidades tan dispares como Lenin o Roosevelt, fue tambi¨¦n ministro de Instrucci¨®n P¨²blica (diciembre de 1931-junio de 1933) y de Estado (hasta septiembre de 1933). Fue embajador de la II Rep¨²blica en Estados Unidos durante los a?os de la guerra. Exiliado en Nueva York, Fernando de los R¨ªos ejerci¨® la docencia en aquella ciudad y ocup¨® el cargo de ministro de Asuntos Exteriores del Gobierno republicano en el exilio entre 1945 y 1947.
Virgilio Zapatero rechaza de plano esos juicios hist¨®ricos de que los intelectuales que se dedican a la pol¨ªtica cuentan sus intervenciones por fracasos. "Muchos dirigentes republicanos", dice el bi¨®grafo, "fueron excelentes pol¨ªticos y en el caso de Fernando de los R¨ªos su labor al frente del Ministerio de Instrucci¨®n P¨²blica fue inmensa y reform¨® la ense?anza en Espa?a". "Ahora bien", agrega, "cuando el pa¨ªs se divide en dos mitades irreconciliables, cuando la radicalizaci¨®n se impone en todos los sectores, algunos intelectuales republicanos se sienten desgarrados. Son momentos hist¨®ricos en los que hay que optar por el blanco o por el negro, aparecen situaciones sin matices que descolocan a personas como Fernando de los R¨ªos".
El libro, publicado por Pre-Textos y presentado recientemente en la Residencia de Estudiantes de Madrid, resalta la enorme lealtad hacia la Rep¨²blica de Fernando de los R¨ªos. "Su entrega", observa Virgilio Zapatero, "le llev¨® incluso a renunciar a la obra que pod¨ªa haber realizado como escritor y como intelectual".
Babelia
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