Adi¨®s a la plaza de Catalunya

Un albergue acoge a los inmigrantes que han dormido seis meses al raso

Han cambiado el pavimento de la plaza de Catalunya por una litera met¨¢lica, los ocho grados de la madrugada del lunes por los casi 20 que proporcionan cuatro paredes y un techo. Esta semana la suerte ha empezado a sonre¨ªr a los m¨¢s de 60 subsaharianos que dorm¨ªan al raso en la plaza de Catalunya desde junio por falta de alojamiento y documentaci¨®n.Un improvisado albergue municipal en Ciutat Vella los acoge desde hace dos noches y reduce, o por lo menos esconde, la verg¨¹enza de dejar a alguien en la calle por no tener un documento de identidad. Durante la primera noche de apertura del albergue, los inmigrantes se quejaron de la falta de servicios sanitarios, aunque ahora entienden que hay que dar tiempo al tiempo: "Sabemos que el Ayuntamiento est¨¢ haciendo un esfuerzo con nosotros", afirmaba ayer Steven Tew, un joven de Sierra Leona, despu¨¦s de dormir en el albergue. Su imagen de Barcelona no es la mejor que puede tenerse. "He dormido aqu¨ª desde que llegu¨¦", asegura mirando hacia un rinc¨®n de la plaza entre unos bancos. Justo al lado se encuentra un mont¨®n de bolsas de pl¨¢stico, mochilas y mantas. ?ste es todo su equipaje despu¨¦s de seis meses de trifulcas permanentes con el Ayuntamiento, la Generalitat, la Delegaci¨®n del Gobierno y la polic¨ªa.

Pero no todos han tenido suerte. Los recursos son limitados y los albergues municipales no pueden acoger a los m¨¢s de 16.000 inmigrantes en situaci¨®n irregular que viven en Barcelona. Algunos de los subsaharianos volvieron a dormir ayer en su rinc¨®n de la plaza. "Nos falta un papel del Ayuntamiento. Sin ¨¦l no podemos entrar en el albergue", se quejaba uno de ellos.

En el refugio de Ciutat Vella caben un centenar de personas, aunque los responsables de Bienestar Social insisten una y otra vez en que "es una instalaci¨®n provisional" y que s¨®lo tiene que servir "para cobijar a los inmigrantes que est¨¢n regularizando su situaci¨®n". Muchos de los subsaharianos de la plaza de Catalunya ya est¨¢n haciendo los tr¨¢mites, aunque ven muy lejos una soluci¨®n definitiva a sus problemas. "De momento espero poder pasar el invierno en el albergue", explicaba ayer otro subsahariano. El Ayuntamiento, en cambio, espera que la soluci¨®n sea m¨¢s r¨¢pida. "Esperamos que la Delegaci¨®n del Gobierno acabe por regularizarlos y puedan valerse por s¨ª mismos", explicaba ayer un portavoz municipal. El Ayuntamiento teme que las ayudas que se est¨¢n dando a los inmigrantes de la plaza de Catalunya puedan provocar un efecto de llamada para otras personas en situaci¨®n irregular. Por ello, esta Administraci¨®n ha puesto una atenci¨®n especial en determinar qui¨¦nes podr¨¢n acceder al albergue. De momento s¨®lo lo har¨¢n los que han iniciado sus tr¨¢mites de regularizaci¨®n y constan en las listas municipales.

Pero dormir en el albergue no supone el fin de los problemas. Los acogidos no pueden entrar hasta ¨²ltima hora de la tarde y tienen que marcharse a las siete de la ma?ana. A¨²n no hay duchas y los otros servicios sanitarios son m¨¢s que limitados. "Para lavarnos tenemos que ir a la Meridiana", explicaba ayer Steven Tew, en referencia a las duchas p¨²blicas que existen en esta avenida. Una vez aseados, los inmigrantes se quedan sin nada que hacer. Mientras no tengan permiso de trabajo no se plantean encontrar un empleo.Por ello, despu¨¦s de la ducha matutina regresan a la plaza de Catalunya. All¨ª no har¨¢n nada, s¨®lo esperar tiempos mejores.