ETA, residuo franquista

Hace 25 a?os, tal d¨ªa como ayer, Santiago Carrillo estaba exiliado en Par¨ªs, al frente de un Partido Comunista que era ilegal en Espa?a. Y Felipe Gonz¨¢lez, camuflado bajo el seud¨®nimo de Isidoro, se mov¨ªa en la semiclandestinidad, porque se opon¨ªa a la dictadura del general Franco. Ayer, Carrillo estaba sentado en la tribuna de ilustres invitados a la conmemoraci¨®n de los 25 a?os de reinado de Juan Carlos I. Y Gonz¨¢lez aplaud¨ªa el discurso del Rey "m¨¢s republicano" desde uno de los bancos de la oposici¨®n socialista, despu¨¦s de haber encabezado durante 13 a?os el banco azul del Gobierno de Espa?a.El presidente del Ejecutivo que ayer di¨® la bienvenida a los Reyes en el Parlamento de la naci¨®n, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, era hace 25 a?os un licenciado en Derecho que preparaba la oposici¨®n para inspector financiero y tributario. Manuel Fraga, fundador de su partido y ayer asistente como presidente de la Xunta de Galicia, era un embajador en Londres que acababa de viajar a Madrid la v¨ªspera de la muerte de Franco. El l¨ªder del PSOE, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, era en 1975 un estudiante de sexto curso de Bachillerato en Le¨®n, y el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, estudiaba primer curso de Medicina en la Universidad Aut¨®noma de Madrid. Ninguno de los que formaba parte de ese hemiciclo hace 25 a?os continuaba presente ayer. S¨®lo estaba presente, e inalterable, el terrorismo de ETA. El ¨²ltimo residuo, hoy, de la ¨¦poca franquista.