Un cantautor en el esca?o

Gorka Kn?rr (Tarragona, 1950) es de nuevo actualidad, y no por su trabajo en el Parlamento europeo o como secretario general de EA, sino por la edici¨®n del elep¨¦ Gogoaren taupadak (Elkarlanean). "Zapatero a tus zapatos", pensar¨¢n quiz¨¢ los m¨¢s desinformados, aunque el conocido pol¨ªtico puede taparles r¨¢pidamente la boca con los seis discos que grab¨® entre los a?os 1974 y 1985.De hecho, Kn?rr, que tiene el coraz¨®n dividido entre la pol¨ªtica y la canci¨®n de autor, no ha dejado de ofrecer recitales. "Canto siempre que me lo piden", corrobora. "Normalmente en festivales ben¨¦ficos y temas relacionados con la cultura nuestra, con el euskera y ese tipo de actividades. Aunque pr¨¢cticamente he cantado m¨¢s fuera de Euskadi, porque no me he dedicado a decir activamente que canto. Ten¨ªa un mont¨®n de cosas que hacer que me imped¨ªan comprometerme a cantar todas las semanas o cada dos".

Efectivamente, ni ofrec¨ªa excesivas actuaciones ni grababa ("la mayor tortura para un cantante") porque no encontraba hueco en su agenda, ya que tres lustros no pasan en balde y su caso no es una excepci¨®n. Y es que aquel cantante que grab¨® su ¨²ltima entrega (Hegaldia) en 1985 es hoy secretario general de Eusko Alkartasuna y ocupa un esca?o en el Parlamento de Estrasburgo, donde trabaja en la Comisi¨®n de Econom¨ªa y Asuntos Financieros, en la de Asuntos Exteriores, en el Comit¨¦ de Derechos Humanos, en el Intergrupo de Naciones sin Estado y en el de Lenguas Minoritarias. Una serie de ocupaciones que alteran su vida privada y le obligan a vivir entre Vitoria, Estrasburgo y Bruselas, pero que, seg¨²n ¨¦l, no influyen en su producci¨®n.

En Gogoaren taupadak refleja su deseo de que el euskera gane terreno, su apoyo a la adhesi¨®n de Trevi?o a ?lava o su reivindicaci¨®n del derecho de los vascos a comer de su "puchero", reflejo de unas inquietudes pol¨ªticas y sociales que justifica por su formaci¨®n acad¨¦mica y motivos generacionales. "En la forma de hacer las cosas de la gente que, como yo, ten¨ªa 18 a?os en mayo del 68, esa referencia es inseparable. Mi generaci¨®n es inseparable de unas inquietudes muy claras", afirma.

Tan poco se aprecian los cambios en su vida privada que el nuevo repertorio se ensambla perfectamente con su obra previa tanto en el aspecto formal ("es, como siempre, una propuesta mel¨®dica con referencias mediterr¨¢neas"), como por sus textos.

"Hay amor, canci¨®n tradicional, problemas nacionales, una reflexi¨®n sobre la violencia, multiculturalidad, multipertenencia,... Son referencias que siempre he tenido", asegura aludiendo al contenido de 11 canciones en euskera en las que cabe cierta influencia celta y piezas tradicionales vascas, navarras y catalanas.

Una de las grandes penas de Kn?rr es no poder cumplir la promesa de regalarle un ejemplar de Gogoaren taupadak a su buen y viejo amigo Ernest Lluch, con quien sol¨ªa conversar en catal¨¢n. De hecho, el compositor no descarta grabar en un futuro un ¨¢lbum en dicha lengua.