Analog¨ªa
Se puede dialogar de pie, de rodillas o tumbado.Supongamos que los GRAPO lograran una cierta influencia entre los j¨®venes, lo que puede suceder en cualquier momento. Al fin y al cabo, son marxista-leninistas, como muchos de los actuales pol¨ªticos hace veinte a?os, y su objetivo es acabar con el capitalismo, finalidad digna de consideraci¨®n. Varios miles de simpatizantes podr¨ªan formar un partido pol¨ªtico, pac¨ªfico y democr¨¢tico, que defendiera los fines de los GRAPO sin practicar el asesinato, aunque sin condenarlo, porque, ya se sabe, "el capitalismo produce m¨¢s muertes".
Imaginemos un pa¨ªs de fantas¨ªa en el que un partido nacional tomara el poder gracias al "brazo pol¨ªtico de los GRAPO", y que s¨®lo pudiera gobernar con el apoyo de ese brazo pol¨ªtico, el cual, insisto, defiende pac¨ªficamente la abolici¨®n del capitalismo. Y ahora supongamos que los GRAPO le pegan un tiro a su hijo para acabar con el capitalismo. ?Saldr¨¢ usted a la calle y exigir¨¢ que todos los partidos pol¨ªticos negocien de inmediato con los GRAPO? Ciertamente, no. Entonces, ?con el brazo pol¨ªtico de los GRAPO? ?Para qu¨¦, si son la voz de los GRAPO? ?Con el partido nacional que gobierna gracias al brazo pol¨ªtico de los GRAPO? ?Est¨¢ usted seguro de que exigir¨ªa dialogar con un partido cuyo poder depende del brazo pol¨ªtico de los asesinos de su hijo? ?Y qu¨¦ les dir¨ªa? ?Que rompan con su aliado? Eso ya lo saben.
Nadie vaya a suponer que la ideolog¨ªa de los GRAPO es menos ideol¨®gica que la de ETA. ?Es el comunismo menos ideol¨®gico que el nacionalismo? Nadie vaya a creer que sus fines son menos "pol¨ªticos". O que sus medios sean "peores". O que est¨¦n m¨¢s locos. Lo ¨²nico que les diferencia es la fuerza. ?Debe dialogarse con unos porque son fuertes, pero no con otros porque son d¨¦biles? ?No es eso dialogar de rodillas? En ese pa¨ªs de fantas¨ªa ser¨ªa tan inmoral (e in¨²til) negociar con los GRAPO como negociar con aquellos que ya han negociado con los GRAPO.
Lo que nos diferencia a unos de otros, en el pa¨ªs real, no es que seamos socialistas, comunistas o nacionalistas, sino que defendamos las libertades civiles o colaboremos en un golpe de Estado que quiere imponer el apartheid a la mitad del Pa¨ªs Vasco. Son palabras de Arzalluz. Y ¨¦l es quien manda.
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