La UE proh¨ªbe las harinas c¨¢rnicas para frenar la extensi¨®n de las 'vacas locas'

Europa dejar¨¢ de usar a partir del pr¨®ximo enero, durante seis meses, las harinas animales. Los ministros de Agricultura reunidos ayer en Bruselas aprobaron esta medida con una excepci¨®n: las harinas de pescado. Es una peque?a concesi¨®n que s¨®lo afecta al 3% de las harinas c¨¢rnicas producidas en Europa. Los Quince confirmaron tambi¨¦n la prohibici¨®n de que entren en la cadena alimenticia las vacas de m¨¢s de treinta meses que no hayan superado la prueba de la encefalopat¨ªa. Tambi¨¦n acordaron compensar al sector por las consecuencias econ¨®micas de esta extraordinaria crisis alimentaria.

Compensar las p¨¦rdidas

Las harinas de carne y hueso de animal estaban prohibidas s¨®lo para los rumiantes por una directiva comunitaria de 1994. A partir de comienzos del pr¨®ximo enero, tambi¨¦n lo estar¨¢n para el resto de los animales de granja que van a parar al consumo humano: cerdos, peces y aves de corral. En principio, ning¨²n informe cient¨ªfico indica que tales harinas sean peligrosas para estas especies, pero el posible fraude cometido en Europa, donde se ha seguido alimentando a las vacas con estas harinas de engorde, ha llevado a la UE a decantarse, finalmente, por tan dr¨¢stica medida.Espa?a defendi¨® desde el principio que lo importante era retirar de la elaboraci¨®n de las harinas s¨®lo la carne de vaca. Finalmente, los ministros s¨®lo han aceptado admitir las harinas de pescado. ?Por qu¨¦? Porque es dif¨ªcil distinguir en una harina c¨¢rnica si entre su materia prima hay carne de pollo, de cerdo o de vaca. En cambio no hay tal problema con la de pescado. Importantes pa¨ªses productores de estas harinas, como Dinamarca, lograron as¨ª un respiro.

A nivel europeo, la excepci¨®n no supone gran cosa. En Europa se producen tres millones de toneladas de harinas de carne. De ellas, s¨®lo 100.000 toneladas son de pescado. La mayor parte de lo que se consume en la UE (400.000) ha de venir, por tanto, de la importaci¨®n.

Alemania y Finlandia fueron los dos ¨²nicos pa¨ªses que votaron en contra de esta prohibici¨®n con excepciones. Alemania, que al igual que Francia ha decretado una prohibici¨®n total (incluidos los animales de compa?¨ªa), consider¨® que la medida era demasiado t¨ªmida. Finlandia, por el contrario, la consider¨® excesiva. Pero la mayor¨ªa se impuso. Y, con ella, un vuelco para la ganader¨ªa europea.

Hubo m¨¢s excepciones. Los productores de harinas animales podr¨¢n utilizar las gelatinas de los no rumiantes para dar sabor a la harinas vegetales y el fosfato bic¨¢lcico, que puede ser obtenido del hueso de la vaca, ya que no se considera peligroso.

Otra de las grandes medidas propuestas por la Comisi¨®n Europea (CE) y que ayer sali¨® adelante fue la de retirar de la cadena alimenticia a todas las vacas adultas (de m¨¢s de 30 meses) sacrificadas que no superen la prueba de detecci¨®n del prion de la encefalopat¨ªa espongiforme bovina o mal de las vacas locas. Mientras los pa¨ªses no generalicen de forma sistem¨¢tica estos controles, toda esa carne (625.000 toneladas al a?o en la UE) debe ser destruida "garantizando el respeto por el medio ambiente y la salud p¨²blica" o dejar que las reses sigan pastando. Esta medida deber¨¢ ser formalmente ratificada el 12 de diciembre por el Comit¨¦ de Gesti¨®n de Carne Bovina y entrar¨¢ en vigor en enero. A partir de esa fecha, pues, aumentar¨¢n considerablemente las garant¨ªas para el consumidor, al que s¨®lo le llegar¨¢ carne de vaca joven, que no ha desarrollado la enfermedad o de vaca adulta previamente analizada. Para destruir toda la carne procedente de las reses adultas, la CE ha previsto ayudas de 140 millones de euros (23.294 millones de pesetas) por cada 100.000 toneladas de carne. El 70% del coste correr¨¢ a cargo de las cuentas comunitarias y el 30% restante a cargo de cada pa¨ªs.

Hubo acuerdo tambi¨¦n en obligar a la destrucci¨®n de los intestinos de las vacas, considerados a partir de ahora tan peligrosos como los sesos, los ojos o el bazo. Y eso a pesar de las protestas del ministro italiano, Alfonso Pecoraro Scanio, que asegur¨® que esta medida va a afectar enormemente a pa¨ªses como Espa?a o Italia donde hay una enorme tradici¨®n de producci¨®n de embutidos no industriales.

El ministro espa?ol de Agricultura, Miguel Arias Ca?ete, -que ayer asegur¨® que los espa?oles pueden comer vacuno con tranquilidad porque el 95% de la carne que se come es de reses de entre 8 a 14 meses- pidi¨® una intervenci¨®n inmediata para compensar a un sector que sufre ya las consecuencias de la crisis. El comisario europeo de Agricultura, Franz Fischler, propuso a este respecto un alza de los avances pagados por las primas de los bovinos, que deber¨ªan pasar del 60% al 80% con car¨¢cter de urgencia "a fin de aligerar la presi¨®n financiera que pesa sobre los productores de vacuno".Los ministros discutieron tambi¨¦n sobre la manera de sustituir ahora en toda Europa los piensos fabricados con despojos c¨¢rnicos por otros de origen vegetal. Dado que los acuerdos comerciales impiden de momento aumentar la producci¨®n europea de granos de colza, girasol y soja, se acaricia la posibilidad de aumentar de forma importante la producci¨®n de proteaginosas, como las habas, los guisantes, los altramuces, los garbanzos, los yeros o las lentejas.