El litoral alicantino se convierte en un nuevo punto de entrada de hach¨ªs hacia Europa

La operaci¨®n yama (plan antidroga previsto por el Ministerio de Interior para atajar la entrada de hach¨ªs por v¨ªa mar¨ªtima) se ha saldado en la provincia de Alicante con una treintena de detenidos y la intervenci¨®n de m¨¢s de 16 toneladas de hach¨ªs a lo largo de este a?o. El subdelegado del Gobierno en Alicante, Luis Garrido, ha anunciado que la Comandacia de la Guardia Civil de Alicante contar¨¢ con un "incremento" de los medios t¨¦cnicos en 2001. Esta zona del litoral mediterr¨¢neo se ha convertido en uno de los puntos m¨¢s importantes del narcotr¨¢fico.

La operaci¨®n yama se implant¨® con motivo de la "gran presi¨®n" policial establecida en el estrecho de Gibraltar, C¨¢diz y M¨¢laga en los ¨²ltimos a?os. Esta circunstancia oblig¨® a los traficantes a cambiar de ruta para introducir los alijos en Europa. De este modo, el litoral valenciano se convierte en una v¨ªa f¨¢cil de acceso para los camellos, seg¨²n explic¨® el subdelegado del Gobierno en Alicante. Tras analizar la situaci¨®n, el Ministerio de Interior aplic¨® este "ambicioso" plan antidroga con el fin de atajar la introducci¨®n de hach¨ªs por v¨ªa mar¨ªtima. Desde su puesta en marcha, el pasado 30 de enero, la operaci¨®n yama se ha saldado con cerca de 30 detenidos, un muerto, y la incautaci¨®n de m¨¢s de 16 toneladas de hach¨ªs, adem¨¢s de la localizaci¨®n de una quincena de embarcaciones n¨¢uticas.La aparici¨®n continuada de embarcaciones abandonadas en el litoral mediterr¨¢neo durante 1999 alert¨® a los agentes de la Guardia Civil, quienes r¨¢pidamente lo pusieron en conocimiento del Gobierno central. Las pesquisas llevadas a cabo por el Grupo de Investigaci¨®n Fiscal y Antidroga (GIFA) de la Guardia Civil desecharon la posibilidad de que estas embarcaciones fueran utilizadas para el desembarco de inmigrantes ilegales. Fue entonces cuando la Administraci¨®n central puso en marcha este dispositivo especial.

Los traficantes de hach¨ªs se agrupan en redes, integrados por europeos y ¨¢rabes, perfectamente coordinados entre s¨ª. El "componente ¨¢rabe suele utilizarse como mano de obra barata y ocasional", seg¨²n se?alaron fuentes del GIFA. El modo de proceder de los camellos para la introducci¨®n de drogas blandas consiste en la contrataci¨®n de expertos pilotos que a bordo de una lancha, tipo z¨®diac, son capaces de navegar entre seis y siete horas "de un tir¨®n". Se han descubierto casos de pilotos que han llegado incluso hasta las costas del sur de Catalu?a. Estas lanchas, valoradas entre diez y doce millones de pesetas, poseen cerca de 10 metros de eslora, est¨¢n impulsadas por motores de 200 caballos de vapor, y cuentan con tanques de combustible auxiliares. Los pilotos parten hacia el litoral aprovechando las ¨²ltimas horas del d¨ªa, y navegan durante la noche. "Manejan el GPS como los ¨¢ngeles", afirmaron fuentes de la Guardia Civil. Cada una de estas embarcaciones, que normalmente llevan a un solo tripulante, transporta entre 1.500 y 2.000 kilos de hach¨ªs, repartidos entre 50 y 60 fardos de unos 30 kilogramos cada uno. Cuando llegan al litoral, vigilantes y portadores se aseguran de que el material llegue a los distribuidores. Fuentes de la Guardia Civil precisaron que la operaci¨®n de desembarco de los fardos a tierra puede alcanzar un tiempo m¨¢ximo de siete minutos.

Fuentes de la Guardia Civil expresaron su satisfacci¨®n por los resultados obtenidos hasta la fecha, pese a las limitaciones en cuanto al n¨²mero de efectivos que actualmente integran el GIFA. Sin embargo, consideraron que la labor de contenci¨®n no es suficiente, "para desmantelar estas redes que manejan miles de millones de pesetas".