Los problemas como receta
Ciudad Sur, la serie que Antena 3 estren¨® el lunes, se nutre del lado m¨¢s problem¨¢tico de la realidad y de la ¨¦pica que esta realidad ha generado en la ficci¨®n. Con un planteamiento de trenza narrativa que potencia un reparto coral, y que permite una identificaci¨®n a la carta por parte de los espectadores, la serie repite esquemas ya conocidos. No s¨®lo el modelo m¨¢s obvio de la serie brit¨¢nica Eastenders, emitida por las cadenas auton¨®micas, sino otros producidos, sin ir m¨¢s lejos, por la misma cadena y que tambi¨¦n explotaban ese gusto por el conflicto social e intergeneracional aderezado con la vinagreta de una moralina algo t¨®pica pero de f¨¢cil comprensi¨®n.
En la pr¨¢ctica, todo eso se traduce en una bater¨ªa de conflictos y antagonismos: ricos contra pobres, hombres contra mujeres, padres contra hijos, triunfadores contra fracasados y, como guinda, un par de hermanos enemistados por una herencia. Se trata de recrear las circunstancias que rodean un grupo de vidas veros¨ªmiles y de desarrollar cierto discurso sociol¨®gico sobre esa Espa?a que, con independencia de qui¨¦n gobierne, siempre va mal y en la que la droga, el paro y los malos tratos son, m¨¢s que noticia, costumbre.
Que los actores est¨¦n bien y los guiones sean solventes ya no es un hecho excepcional, pero no est¨¢ de m¨¢s repetirlo. Por suerte, la profesionalizaci¨®n de la industria televisiva ha convertido la correcci¨®n en un requisito indispensable para abrirse paso en la selva audiovisual. Otra cosa es si basta con eso.
En cuanto al tan cacareado dinamismo del que alardean los responsables de las cadenas, habr¨¢ que esperar para ver si es formal o conceptual. A veces, esta prisa narrativa se convierte en una patra?a efectista para esconder la pobreza de las tramas y disimular, bajo una aceleraci¨®n gestada en la sala de montaje, las propias carencias.
Ciudad Sur, sin embargo, da lo que promete. De entrada, se aleja de la impostura casi par¨®dica del culebr¨®n y, adem¨¢s, recurre a una textura narrativa adulta, m¨¢s propia de una serie semanal que de una diaria y que deber¨ªa procurar no quedarse atrapada por el peso de sus confesas influencias.
De todos modos, que una cadena privada complete su parrilla de tarde con un producto poco primario, y que junto al eficaz Pasapalabra consigue desintoxicarnos de los efluvios paranormales del Sabor a ti, es una buena noticia. Parece que la dur¨ªsima competencia entre Tele 5 y Antena 3 ya no consiste s¨®lo en comprobar qui¨¦n es capaz de bajar m¨¢s el list¨®n, sino en atreverse a producir f¨®rmulas previsibles en muchos aspectos pero honestamente eficaces.
[Ciudad Sur tuvo en su estreno 1.877.000 espectadores, con una cuota de pantalla del 14,6%, y el martes, 1.865.000 personas, con un 14,7% de cuota].
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