HP recolocar¨¢ a parte de los despedidos de su planta

La multinacional Hewlett-Packard (HP) decidi¨® cerrar a finales de 2000 su planta de Sant Cugat del Vall¨¨s (Barcelona), subcontratar parte de la producci¨®n, trasladar otra parte a Hungr¨ªa y pa¨ªses asi¨¢ticos y eliminar 198 puestos de trabajo de una plantilla de 855 trabajadores. El que es el centro m¨¢s antiguo de la empresa californiana en Espa?a y su referente europeo para fabricar impresoras de consumo, ha adquirido varios compromisos tras un mes de conflicto con los sindicatos: el cierre progresivo de la actividad hasta marzo, indemnizaciones y ayudas para los proyectos empresariales autogenerados por sus trabajadores y la recolocaci¨®n de algunos de los despedidos.

HP ha contratado a la compa?¨ªa Moa, especializada en recolocar a directivos y personal cualificado, para que se encargue del proceso. Del total de 198 empleados despedidos, HP s¨®lo ha accedido a mantener a 16 empleados, a los que reubicar¨¢ en otros departamentos de la f¨¢brica de Sant Cugat del Vall¨¨s, que sigue produciendo otro tipo de impresoras.

Fuentes de Moa se?alaron que los empleos alternativos se localizan en empresas de electr¨®nica y de montaje de mec¨¢nica el¨¦ctr¨®nica, con salarios anuales de entre 2,2 y 2,6 millones de pesetas al a?o, es decir, algo inferiores a los que percib¨ªan los mismos trabajadores en HP, donde la media salarial es de 2,7 millones.

Empleos alternativos

Por esta raz¨®n, algunos representantes sindicales han alzado su voz contra estas recolocaciones. El secretario general de la Federaci¨®n del Metal de CC OO, Vicent Rocosa, afirma que se trata de empleos 'precarios', con salarios inferiores inaceptables. Por ello, las reuniones entre los representantes sindicales y la empresa contin¨²an.

Curiosamente, mientras HP subcontrata el montaje de un mill¨®n de impresoras, que son las que fabricaba Sant Cugat del Vall¨¦s y que suponen un 5% de la producci¨®n total, la producci¨®n en otras plantas europeas, como la Ly¨®n (Francia), que ensambla ordenadores y servidores, se mantiene. La empresa argumenta que Ly¨®n goza de una ubicaci¨®n estrat¨¦gica en el centro de Europa que le aporta ventajas competitivas y alude al mayor valor a?adido de sus productos frente a las impresoras.

La llegada de HP a Catalu?a fue, poco m¨¢s o menos, un ¨¦xito de la pol¨ªtica de viajes al extranjero del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. Hace cuatro a?os, la multinacional anunci¨® que su planta m¨¢s antigua en Espa?a pasaba por graves problemas de competitividad. Juan Soto, el presidente de HP en Espa?a, explic¨® a las autoridades catalanas en 1998 que el escollo eran los aranceles que se pagan por cada uno de los componentes a ensamblar. Nadie supo corregir el efecto de esos aranceles sobre el precio final.