Solidaridad espa?ola

?Cu¨¢nto nos hemos enorgullecido al escuchar en los ¨²ltimos telediarios lo solidarios que somos los espa?oles! ?Qu¨¦ alegr¨ªa y qu¨¦ paz el que se nos vista con el traje de moda!... Ya hemos tranquilizado nuestras conciencias, ?ya hemos cumplido!...

Sin adem¨¢n de aguar la fiesta, y mucho menos de meter a todos en el mismo saco..., ?qu¨¦ hip¨®critas somos! No es que quiera negar la bondad del hecho en s¨ª; sencillamente, me gustar¨ªa que -a trav¨¦s de estas ¨¢cidas e ir¨®nicas palabras- nos di¨¦semos cuenta de que no hace falta cruzar el charco para tranquilizar nuestras conciencias. ?Los tenemos aqu¨ª y est¨¢n por todas partes!... Claro est¨¢ que no es lo mismo y que, en cualquier caso, le falta un poquito de emoci¨®n y motivaci¨®n a la cosa.

Pero no nos rasguemos las vestiduras, que no es esto piedra de esc¨¢ndalo. Y es que si hay algo que caracteriza a la inmadurez es la actuaci¨®n a bote pronto, por impulsos emocionales, teniendo siempre como punto de referencia el qu¨¦ dir¨¢n. Inmadurez que no es m¨¢s que la profunda dosis de superficialidad que tapiza a nuestra sociedad.

As¨ª que paz y a otra cosa.