La nueva directiva de Greenpeace prepara el cese del dirigente hist¨®rico Xavier Pastor
Cinco destacados consejeros salen en defensa de la trayectoria del miembro fundador
Aunque los miembros de la nueva directiva se escudaron en los estatutos para no hacer declaraciones, diversas fuentes de Greenpeace -que piden el anonimato- sugirieron que los 15 a?os de Pastor como mandatario tocan a su fin.
'Queremos llamar a la reconciliaci¨®n', dijeron ayer los cinco significativos miembros del Consejo Nacional, un organismo con 100 consejeros. 'Todos en Greenpeace tenemos iguales objetivos. Quisi¨¦ramos que no haya vencedores ni vencidos, o que se d¨¦ entrada en los cargos directivos a gente limpia de enfrentamientos'.
La inc¨®gnita parece radicar en c¨®mo relevar a Pastor sin destrozar la imagen de Greenpeace. Los cinco consejeros insistieron en que ese relevo no deber¨ªa implicar una descalificaci¨®n: 'Ser¨ªa muy injusto, porque si Greenpeace se ha labrado un prestigio de radiante transparencia, se debe tambi¨¦n a la gente que ha estado al frente'.
La crisis salt¨® el 31 de enero de 2000 cuando la Junta Directiva rechaz¨® el nombramiento, de 15 de diciembre de 1999, del eurodiputado independiente socialista Jos¨¦ Mar¨ªa Mendiluce como presidente de Greenpeace Internacional. Mendiluce estaba a punto de tomar posesi¨®n del cargo. La Junta consider¨® incompatible la presidencia con ser eurodiputado, y la reacci¨®n en Greenpeace de otros pa¨ªses tampoco fue muy favorable al nombrado. 'En las c¨²pulas de las ONG hay alergia a los pol¨ªticos', replic¨® Mendiluce en EL PA?S. Pastor, que le hab¨ªa presentado p¨²blicamente, qued¨® tocado. Posteriormente desminti¨® la fuga masiva de socios.
'En el tema Mendiluce hubo un error', reconoci¨® ayer Caso. Varillas matiz¨®: 'La idea era muy sana, porque el movimiento ecologista debe llegar a otros sectores y Greenpeace ha colaborado en campa?as con ONG de desarrollo. Pero no era el momento ni la persona'.
Traslados laborales
Antes de Mendiluce ya hab¨ªa problemas. Juantxo L¨®pez de Uralde, director de campa?as, se fue a Holanda en 1999 como responsable de la campa?a internacional sobre t¨®xicos tras discrepancias con la direcci¨®n.
En marzo hubo problemas laborales. Pastor orden¨® el traslado de Madrid a Mallorca de Eva Hern¨¢ndez, responsable de h¨¢bitat y costas, y de Carlos Bravo, jefe de campa?as de energ¨ªa nuclear; otra trabajadora fue trasladada a Barcelona.
Veintisiete de los 37 empleados de Madrid firmaron una carta de apoyo a sus compa?eros y acusaron a la direcci¨®n de represaliar a disidentes. El caso lleg¨® a los tribunales, y los trabajadores, tras un acto de conciliaci¨®n, se han reincorporado. Pero de los 27 firmantes 10 ya han dejado Greenpeace. Otra dimisi¨®n fue, en verano, la de Cristina ?lvarez, secretaria de la Junta.
Un punto m¨¢s de fricci¨®n en la reciente gesti¨®n de Pastor fue la idea de comprar un edificio en Calvi¨¤ (Mallorca). Los disidentes se?alaron que el director ejecutivo reside en la isla. Pastor, en julio, dio datos sobre el proyecto: un coste de 200 millones de pesetas; un cr¨¦dito a 25 a?os; funcionar¨¢ con energ¨ªa e¨®lica y los excedentes podr¨¢n venderse; ser¨¢ un centro de formaci¨®n para acciones marinas. 'Recordemos', dijo ayer Varillas, 'que al fundarse Greenpeace se pens¨® que la sede fuese Santiago o Palma de Mallorca, porque la organizaci¨®n deb¨ªa estar cerca del mar. Por fin, por otras causas, se eligi¨® Madrid'.
Los cinco consejeros concluyeron: 'Fue un error no difundir el problema desde el principio entre los socios'.
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