Juguete

El lunes, en una excelente entrevista de Ignacio Camacho en Abc, dec¨ªa Javier Arenas que las cajas de ahorro andaluzas son el 'juguete particular' de Manuel Chaves. Si eso es cierto, Chaves lo disimula muy bien. El proceso de fusi¨®n de cajas, tan necesario, naci¨® con muy mal pie. Quiz¨¢ por prepotencia o m¨¢s probablemente por ingenuidad, se anunci¨® de sopet¨®n, sin negociaciones ni sondeos previos, dando por supuesto que nadie se opondr¨ªa a algo tan innegablemente ¨²til. Pero pronto se vio que la trama de intereses que rodeaba las cajas era demasiado espesa.

El primero en protestar fue el padre Castillejo, presidente vitalicio de Cajasur y confeso admirador de los m¨¦todos de gesti¨®n de Jes¨²s Gil. Por clientelismo o quiz¨¢ porque la derecha no puede evitar ponerse en fila en cuanto ve unas cuantas sotanas, el PP lo apoy¨® de inmediato.

Pero lo peor estaba por ver. Se quejan los dirigentes del PSOE de que el PP ha saboteado el proceso, y en esto no parece que tengan mucha raz¨®n. El sabotaje m¨¢s efectivo lo han llevado a cabo los socialistas que apoyaran la idea de una fusi¨®n en dos fases -las cajas sevillanas de un lado, el resto de otro y luego dios dir¨¢-, una idea que ha servido para aplazar un proceso que ya era muy urgente cuando se plante¨®.

El papel que en todo este asunto vienen desempe?ando los presidentes de las cajas sevillanas es digno de estudiar. Aparentemente, deb¨ªan de ser ellos los m¨¢s obedientes con la Junta: llegaron a sus cargos sin experiencia ni formaci¨®n espec¨ªfica. No ten¨ªan otros activos que sendos t¨ªtulos de licenciados en Derecho y sus carn¨¦s del PSOE. Juan Manuel L¨®pez Benjumea a lo m¨¢s que hab¨ªa llegado era a vicepresidente de la Diputaci¨®n de Sevilla. Isidoro Beneroso hizo su carrera a la sombra del protagonista de uno de los fracasos m¨¢s sonados del PSOE: Manuel del Valle, que logr¨® perder la alcald¨ªa sevillana mientras sobre la ciudad ca¨ªa el chaparr¨®n de las inversiones de la Expo.

Una vez situados, Beneroso y Benjumea fueron haci¨¦ndose con sus propios apoyos. El resultado es que lograron sindicar a su alrededor intereses muy diversos y hoy cuentan con el respaldo de la patronal, del PP, del PA, de IU y de algunos dirigentes del PSOE. Entre estos ¨²ltimos los hay que defienden sus propios intereses y quienes se contentan con hacerle la pu?eta a la consejera de Econom¨ªa.

Supongo que para recordarles que son militantes, las ¨²ltimas reuniones para tratar de convencer a Beneroso y Benjumea de que sigan lo dispuesto por la Consejer¨ªa de Econom¨ªa se han celebrado en la sede del PSOE. No parece que el lugar les desasosegase mucho. Pero, por si acaso, pronto recibieron consuelo: poco despu¨¦s de la ¨²ltima reuni¨®n, los presidentes de las C¨¢maras de Comercio y de las patronales de C¨¢diz, Huelva, Jerez y Sevilla sal¨ªan en defensa de ambos diciendo que eran v¨ªctimas de una 'venganza pol¨ªtica' y pidiendo a la consejera de Econom¨ªa que 'deje de estorbar'.

La fusi¨®n de cajas era, con diferencia, la decisi¨®n de m¨¢s alcance tomada durante los mandatos de Chaves, pero el modo en que el proyecto marcha a la deriva es toda una met¨¢fora de la situaci¨®n interna del PSOE. Parece que, en efecto, nadie discute el liderazgo de Chaves, pero se ve que tampoco le hacen mucho caso.