Fascinados por las tinieblas
Anthony Hopkins se comi¨® ayer a los asistentes a la rueda de prensa posterior al pase de Hannibal en Berl¨ªn. De negro, con reloj amarillo, pelo raso, mirada azul intensa y verbo contundente dio una lecci¨®n de c¨®mo decir frases inteligentes y huir de lugares comunes en lo que es el lanzamiento europeo de esta secuela de la ya legendaria El silencio de los corderos, que esta vez ha dirigido Ridley Scott y no Jonathan Demme.
Hopkins ha metido con talento al terror¨ªfico Hannibal Lecter en los libros de historia del cine. El asesino can¨ªbal est¨¢ ya en el lugar de los villanos imborrables. 'Estas criaturas nos atraen porque estamos fascinados por las tinieblas que hay en cada uno de nosotros', asegur¨®. 'Creo en el ser humano y en sus paradojas. Por eso, Hannibal gusta como han gustado Ricardo III, Cuasimodo, Dr¨¢cula, el Yago de Otelo, son seres prisioneros de su desgracia y de su deformidad'.
Cree Hopkins que ir al cine a ver Hannibal es sano para la mente, a pesar de que ayer cuatro mujeres se desmayaron en distintos cines de Italia por culpa de sus gustos culinarios. Eso por no mencionar la acogida que le ha brindado el p¨²blico de Estados Unidos, que la ha convertido, tras el fin de semana de su estreno, en la tercera pel¨ªcula de la historia tras Parque jur¨¢sico y La guerra de las galaxias que arranca tan alto. El filme ha recaudado 58 millones de d¨®lares (m¨¢s de 10.000 millones de pesetas) en dos d¨ªas, con lo que el p¨²blico ha demostrado no darle demasiada importancia al hecho de que Demme y la anterior protagonista, Jodie Foster, sustituida por Julianne Moore, renunciaran a seguirle la pista a Lecter.
Oscura belleza
'El p¨²blico que acude a verla no est¨¢ loco ni es retorcido. La oscuridad es parte de nuestra naturaleza y puede crear cosas bellas. La Florencia del Renacimiento estuvo ba?ada en sangre. Es arriesgado tratar estos temas. Ridley Scott ha hecho una pel¨ªcula valiente, poderosa y arriesgada. Ah¨ª est¨¢ el m¨¦rito, eso es lo que hay que hacer, no caer en la seguridad, la comodidad, lo pol¨ªticamente correcto, eso es lo que m¨¢s me aterroriza, el peor c¨¢ncer de todos'.
Con este discurso, Hopkins levant¨® los primeros aplausos por intervenci¨®n en una rueda de prensa de la presente Berlinale. Y encima dio noticias. Por ejemplo, la tercera parte. 'S¨ª, me gustar¨ªa hacer una tercera parte, estamos en conversaciones con Dino de Laurentiis y espero que la rodemos este a?o'. Una tercera parte que puede ser la primera porque De Laurentiis, el productor, presente tambi¨¦n en la rueda de prensa, asegur¨® que puede volver a rodar El drag¨®n rojo, la primera novela de Thomas Harris en la que aparece Hannibal Lecter, y que fue rodada en 1986 por Michael Mann. En aquella versi¨®n, titulada Manhunter, Brian Cox interpretaba el papel que ha glorificado de manera demoniaca Hopkins.
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