Bar?a y Madrid discrepan sobre la validez del gol anulado

Un error arbitral, s¨®lo eso, aunque deportivamente muy grave, ha derivado en la gran bronca de la temporada. Y, lo que es peor, ha despertado los viejos fantasmas del f¨²tbol espa?ol cuando hace d¨¦cadas que parec¨ªan definitivamente desterrados. En Barcelona, no sin raz¨®n, se quejan airadamente de una jugada que pudo devolver a los azulgrana al tren de la Liga, pero que en ning¨²n caso solapa la err¨¢tica trayectoria del equipo desde principios de temporada.

Cierto que Losantos Omar estuvo torpe, y pudo haberse dejado guiar por un indicador que habitualmente es infalible: el modo en que los madridistas aceptaron el gol. Ni una protesta, siquiera de Casillas, que alude ahora a la supuesta ceguera que le produjo la posici¨®n de Gerard. El ¨¢rbitro, sereno y muy profesional toda la noche, tampoco dialog¨® con su asistente para cotejar las apreciaciones de uno y otro. Pero el fallo no deber¨ªa justificar la tormenta de victimismo que se ha desatado en Barcelona. En aras de su propia grandeza, el club azulgrana no puede olvidar que uno de los sostenes de su etapa reciente m¨¢s gloriosa -la d¨¦cada de los noventa con Johan Cruyff al frente de la nave- fue su capacidad para, precisamente, liquidar a?os y a?os de victimismos. Un concepto que fue exportado a Madrid, con Tenerife como punto de partida. La noticia para el Bar?a debe ser la recuperaci¨®n del equipo, que fue capaz de someter en su propia casa a un rival en alza. Por esa v¨ªa, los azulgrana elevaron su cotizaci¨®n, recuperaron buena dosis de autoestima y sembraron un pu?ado de dudas en su enemigo.

Por motivos muy diferentes, pero el Madrid tambi¨¦n sali¨® tocado de la noche del s¨¢bado. El equipo se sinti¨® asfixiado, sin gasolina para exprimir el buen f¨²tbol que le ha distinguido este a?o en m¨¢s de una ocasi¨®n. Adem¨¢s de pagar sus propias lagunas, el Madrid ha soportado un mes de febrero dur¨ªsimo, con partidos de enorme tensi¨®n y ante rivales de talla que se jugaban la vida en cada envite: casos del Valencia, el Athletic, el Lazio, el Deportivo y el Bar?a. No se puede comer pasteles todos los d¨ªas y el Madrid ha terminado empachado. Ahora tendr¨¢ una importancia capital la capacidad de Vicente del Bosque para mover las piezas y dosificar los esfuerzos.

En definitiva, uno y otro tienen tarea por delante. El Bar?a debe cerrar la herida de Chamart¨ªn y el Madrid recuperar ox¨ªgeno. Quien quede enredado en lo sucedido el s¨¢bado lo pasar¨¢ mal. Cometer¨¢ el mismo error que Losantos Omar.