La joya contempor¨¢nea se luce en el museo

'En estos momentos la joya como s¨ªmbolo de ostentaci¨®n ha entrado en crisis. Es m¨¢s f¨¢cil que alguien se gaste varios millones en un coche de lujo que en un diamante. La funci¨®n de decir qui¨¦n eres y qu¨¦ tienes ya no es exclusivo de la joyer¨ªa y esto ha permitido que los joyeros podamos experimentar m¨¢s y trabajar las piezas como una manera de expresi¨®n personal'. Habla Ramon Puig Cuy¨¤s, dise?ador de joyas y uno de los art¨ªfices de que desde hoy el Museo de Artes Decorativas de Barcelona incorpore a sus fondos una colecci¨®n de joyer¨ªa contempor¨¢nea. Se trata de un conjunto de 120 piezas realizadas por 32 creadores afincados en Barcelona entre 1940 y 1990 que orfebres y empresas han donado al museo.

Las piezas, valoradas en su conjunto en unos 12 millones de pesetas, se exhiben hasta el 31 de noviembre en el marco de una exposici¨®n que despu¨¦s pasar¨¢ por diferentes museos europeos. Lleva como t¨ªtulo El laboratorio de la joyer¨ªa y su comisaria, M¨®nica Gaspar, la ha organizado desde un punto de vista tem¨¢tico en cuatro grandes ¨¢mbitos, en funci¨®n de su relaci¨®n con la naturaleza -por inspiraci¨®n o por la utilizaci¨®n de elementos naturales como guijarros o ramas-, su apariencia formal, el proceso de trabajo o la referencia al individuo.

'No es una exposici¨®n representativa de la joyer¨ªa que se hace en Barcelona porque se centra en una determinada manera de entender este trabajo que, pensamos, es la m¨¢s 'contempor¨¢nea', reconoci¨® ayer Marta Montmany, directora del Museo de Artes Decorativas. La l¨ªnea que se exhibe se considera heredera de la joyer¨ªa modernista y noucentista, en la que no importaba tanto el valor del material utilizado como la belleza u originalidad del dise?o. Esta tradici¨®n en la que podr¨ªan incluirse creadores como Llu¨ªs Masriera, Sunyer i Mercad¨¦ o Juli Gonz¨¢lez, se vio interrumpida tras la guerra civil, aunque joyeros como Manuel Capdevila, por ejemplo, ejercieron de puente con las nuevas generaciones.

En su recuperaci¨®n tuvo y tiene un papel fundamental la Escuela Massana, en la que se ha formado buena parte de los nuevos joyeros y que se ha caracterizado por aunar la artesan¨ªa tradicional con la creaci¨®n art¨ªstica. A principios de la d¨¦cada de 1960, esta escuela inici¨® una l¨ªnea de colaboraci¨®n con la escuela alemana de Pforzheim, lo que permiti¨® intercambio de estudiantes y tambi¨¦n que en Barcelona se conocieran las nuevas corrientes internacionales.

Esta tendencia se conoce con el nombre de Nueva Joyer¨ªa y tiene un car¨¢cter experimental en el que lo que cuenta es la expresi¨®n y libertad creativa del autor antes que el valor de cambio de la pieza. La influencia del surrealismo, el pop-art o la joyer¨ªa ¨¦tnica cambi¨® la manera de enfrentarse a estas piezas que, a grandes rasgos, rehuyen los metales preciosos, en especial el oro, y optan, al igual que hizo la escultura, por incoporar materiales pobres, como piedras o pl¨¢stico.

Durante a?os los creadores catalanes de la nueva joyer¨ªa consiguieron una mayor repercusi¨®n en el extranjero, pero en la ¨²ltima d¨¦cada han abierto en la ciudad varias galer¨ªas especializadas -desde Hip¨°tesi, una de las pioneras, hasta Magari o Forum Ferlandina- que han permitido normalizar la difusi¨®n de la joyer¨ªa contempor¨¢nea, algo que ahora el museo contribuir¨¢ a reforzar.