Con el dep¨®sito lleno
?Ustedes que har¨ªan con un coche nuevo, el permiso de circulaci¨®n en la mano, despu¨¦s de cargarlo hasta el tope de gasolina? Supongo que har¨ªan lo de todo el mundo, probar el invento un poco al azar por un lado y otro, para despu¨¦s emprender el viaje que siempre hab¨ªan deseado.
Pues de eso se trata. Al igual que los dem¨¢s mortales llenamos el dep¨®sito de gasolina, con la misma facilidad y desenvoltura, el presidente Zaplana pretende llenar de pensamiento su pr¨®xima etapa pol¨ªtica durante este viernes y s¨¢bado alicantino. Una especie de think tank de fin de semana. Porque la convenci¨®n ideol¨®gica del PP valenciano no es m¨¢s que eso, ni menos tampoco. Pretende cargar bater¨ªas, llenar el dep¨®sito, reunir a un grupo de expertos que aporten nuevas ideas para el futuro de su programa.
Con la tarjeta de presentaci¨®n reci¨¦n editada, es decir, el libro, '¨¦ste soy yo' o como prefieran ustedes decirlo, y el dep¨®sito de combustible ideol¨®gico lleno, tiene ya el coche preparado para viajar durante dos o tres a?os por lo menos. Por supuesto que los pol¨ªticos, en t¨¦rminos generales, solo acuden a las teor¨ªas para justificar sus acciones, intentando garantizar socialmente lo que ya ten¨ªan decidido de antemano. Pero es igual, hasta el pensamiento sirve de combustible cuando se sue?a con una meta.
Imaginen por un momento la situaci¨®n en Alicante. A la voz de 'll¨¦neme el dep¨®sito, por favor', comienzan a chorrear los litros para entender Espa?a y Europa desde la Comunidad Valenciana, a?adiendo unas gotas de garant¨ªa frente a las situaciones de dependencia. Por aquello de que sea gasolina sin plomo, sigue fluyendo el l¨ªquido elemento con la cohesi¨®n territorial y nuestro proyecto de futuro. Para finalizar la operaci¨®n, subimos los octanos con un panorama del hombre y la mujer en el siglo XXI, hasta que se oye saltar el gatillo de seguridad de la manguera con las ¨²ltimas gotas de acci¨®n pol¨ªtica para una nueva etapa. El jefe de operaciones enrosca la tapa del dep¨®sito y felicita, seg¨²n lo previsto, al ayudante m¨¢s cercano. Todo est¨¢ preparado.
Es entonces cuando llega el gran momento. Sin hacer distinciones equ¨ªvocas, el conductor agradece a todos los servicios prestados, abre lentamente la puerta, pone el contacto, escucha el rugir de la m¨¢quina y como un b¨®lido se lanza hacia la meta, entre los aplausos y felicitaciones del personal. Y es ah¨ª cuando empiezan nuestros problemas, porque con el libro en la mano y el pensamiento rejuvenecido en Alicante, puede que sigamos sin saber cu¨¢les son los objetivos aut¨¦nticos del programa previsto. Las carreteras est¨¢n imposibles, el tr¨¢fico resulta pesado y estamos todos un poco cansados de los viajes de corto recorrido o, simplemente, sin un rumbo conocido. Est¨¢ llegando el momento de saber hacia d¨®nde vamos o de pedirle al conductor que pare, porque queremos bajarnos.
Tambi¨¦n puede ocurrir lo contrario y que nos enteremos de algo nuevo a partir de Alicante. A muchos conductores les gusta sorprender con novedades, sobre todo cuando estrenan coche y llevan la nueva matr¨ªcula europea. En cualquier caso, ya no falta nada, es s¨®lo cuesti¨®n de horas. El se?or est¨¢ servido y el dep¨®sito abarrotado.
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