El 'descuartizador de Mislata' es condenado a 20 a?os de prisi¨®n

Despu¨¦s de cumplir su condena, Nueda no podr¨¢ acercarse al lugar donde reside la familia de la v¨ªctima durante cinco a?os. El acusado deber¨¢ indemnizar a su hija Irene, considerada como la m¨¢s perjudicada por estos hechos, con 20 millones de pesetas, y con otros cinco millones a los padres de la mujer asesinada, Mar¨ªa del Carmen Merino Perell¨®.

El tribunal ha desestimado para Pedro Nueda la petici¨®n de libre absoluci¨®n hecha por el letrado que le defendi¨® y que consideraba que hubo muchas irregularidades durante el proceso, hasta el punto de provocar la indefensi¨®n de su cliente.

La sentencia, redactada por el tribunal de la secci¨®n segunda de la Audiencia de Valencia, no deja lugar a dudas sobre los hechos que han llevado a Nueda a prisi¨®n. Hacia las ocho de la ma?ana del d¨ªa 6 de octubre de 1995, tras una de las habituales discusiones del matrimonio, Pedro Nueda mat¨® a su esposa Mar¨ªa del Carmen Merino, de 24 a?os de edad, y a la que apenas le quedaban unos d¨ªas para dar a luz. Seg¨²n los magistrados, 'la cogi¨® por el cuello presionando hasta que qued¨® desvanecida y, como observ¨® que segu¨ªa con vida, la remat¨® estrangul¨¢ndola'. El acusado dej¨® el cuerpo en el mismo lugar donde la mat¨® y cuatro horas despu¨¦s la arrastr¨® con una manta hasta el cuarto de ba?o. Tras lo sucedido Nueda se march¨® a trabajar. Cerca de las 22.30, ya de vuelta a casa, procedi¨® a descuartizar el cad¨¢ver de su esposa utilizando un cuchillo. Luego, introdujo los pedazos en varias bolsas y se dirigi¨® hacia el pantano de Forata, donde tir¨® algunas de esas bolsas, mientras que enterr¨® otras en diversos campos del t¨¦rmino de Chiva. De todos los restos, la polic¨ªa s¨®lo pudo recuperar los huesos pertenecientes a un brazo de la v¨ªctima.

Seg¨²n el tribunal, la actitud de Nueda en relaci¨®n a los hechos no fue la normal de una persona que siempre mantuvo que la muerte de su mujer fue accidental. El acusado explic¨® en diversas declaraciones que su mujer muri¨® por una rotura de cuello mientras la as¨ªa fuertemente del cuello y por la espalda con el fin de evitar que ¨¦sta le clavara un cuchillo. Pero los magistrados no encuentran l¨®gico que la mujer, en avanzado estado de gestaci¨®n y por lo tanto con poca movilidad, intentara atacarle. De la misma manera, tampoco consideran l¨®gico que, si hubiese sido la muerte accidental tal y como ha mantenido reiteradamente Nueda, ¨¦ste no pidiera ayuda a nadie o intentara al menos salvar la vida del ni?o que estaba a punto de nacer.

La sentencia asegura que a la vista del informe pericial no se puede sostener la versi¨®n de los hechos dada por el acusado. A falta de cad¨¢ver, los peritos basaron su informe en las declaraciones de Nueda en las que describi¨® los signos externos que presentaba su mujer en el momento de morir. 'Signos', aseguraron los peritos, 'que corresponden a una muerte producida por asfixia, estrangulaci¨®n, y no de una manera repentina como afirma el procesado por rotura medular'.

Durante el juicio, el letrado de la acusaci¨®n, Virgilio Latorre, calific¨® los hechos como propios de un 'persona fr¨ªa, calculadora'. Para Latorre, no hab¨ªa ninguna duda de que el asesino de Mar¨ªa del Carmen Merino se correspond¨ªa con todos los rasgos de una persona 'depravada'.

La familia de Mar¨ªa del Carmen Merino anunci¨® ayer que tiene la intenci¨®n de recurrir la sentencia porque considera 'insuficiente' la condena y para reclamar que se contemple un delito de asesinato y aborto en concurso ideal.