Un l¨ªder en las grandes citas

Y, como casi siempre, como sucedi¨® en Mil¨¢n, Leeds o Madrid, Rivaldo se alz¨® como un gigante y cubri¨® las gradas de un espeso e impotente manto de silencio. No es algo nuevo: ya pas¨® con sus tres goles en San Siro (3-3), con su gol en Elland Road (1-1) o con los dos que marc¨® en el Bernab¨¦u por no citar al anulado (2-2). El Bar?a jug¨® un partido desastroso en Bala¨ªdos, y nunca agradecer¨¢ lo suficiente la aportaci¨®n de Rivaldo, un futbolista que a cada jornada parece surgido de otro planeta. Anoche, donde puso el ojo puso el bal¨®n: remat¨® dos veces a puerta -el ¨²nico capital azulgrana en todo el partido- y en las dos encontr¨® la red. Rivaldo control¨® primero un bal¨®n de Overmars y lo clav¨® en la escuadra. Y, al filo del descanso, cuando el Bar?a volv¨ªa a estar con el agua al cuello, transform¨® un libre directo desde 25 metros. Bala¨ªdos enmudeci¨®: no le bast¨® tener acorralado, asediado al Bar?a. Imposible luchar contra un futbolista de otra dimensi¨®n.

Quiz¨¢ mejor no pensarlo. Quiz¨¢ es mejor no imaginar que ser¨ªa del Bar?a sin Rivaldo, que, en marzo, cuando queda por disputar el ¨²ltimo tramo de temporada, ya ha igualado su mejor registro como azulgrana: el brasile?o suma 29 goles, los mismos que marc¨® en el segundo a?o de Van Gaal y que le sirvieron para ganar el Bal¨®n de Oro. El Bar?a sobrevivi¨® en la UEFA, la segunda divisi¨®n europea, gracias a Rivaldo, el futbolista que la directiva medita traspasar al Milan en junio y fichar a otro delantero por no poder mantener los 1.100 millones de ficha que percibe por temporada. Pero, entretanto, sus goles mantenendr¨¢n un discurso institucional que cada vez suena m¨¢s hueco: que el Bar?a es a¨²n el ¨²nico equipo que puede conquistar las tres competiciones en liza. Han ganado, hasta las semifinales, un mes m¨¢s de tiempo.